Guerras de Independencia Hispano-Americanas Independencia de México Gobierno y final de Iturbide

Primeros meses de gobierno

El Imperio enfrentaba la oposición republicana y la resistencia de la guarnición española de San Juan de Ulúa. Iturbide, asistido por su Consejo de Estado, comenzó la abierta pugna contra el Congreso: su primera propuesta fue disminuir el número de diputados, para de esta manera deshacerse de alguna parte de sus enemigos e intentar así nulificarlos.​

Después de la coronación, el comercio y la minería bajaron su actividad hasta que se estableció nuevamente la confianza; aunque algunos españoles peninsulares acaudalados, temiendo por su seguridad, prefirieron abandonar el Imperio.​ Los partidarios del Plan de Iguala, al sentirse defraudados, engrosaron las filas de la logia masónica escocesa, la cual hizo sentir su influencia en la política. El brigadier de Nuevo Santander, Felipe de la Garza, al enterarse de que el Tratado de Córdoba se había roto, propuso al Congreso adaptar un gobierno republicano, ofreciendo una fuerza de caballería de 2.000 efectivos.​

El ministro plenipotenciario de Colombia, Miguel Santa María, animó a los diputados para seguir la política republicana que había adaptado su propio país. Por medio de agentes que tenía introducidos en las logias y en los círculos oposicionistas, Iturbide se enteró de la situación. El Emperador expidió sus pasaportes a Santa María y el 26 de agosto de 1822, ordenó el arresto de los diputados José Joaquín Herrera, Lombardo, Teresa de Mier, Fagoaga, Echarte, Tarrazo, Obregón, Tagle, Echenique, Anaya, Iturribarría, Zebadua, Zercero, Mayorga y otros más. Los reclamos del Congreso fueron inmediatos; Iturbide justificó que, facultado por la Constitución española, había procedido a la aprehensión de los involucrados por causa de conspiración, pidió calma y solicitó esperar la resolución de los tribunales.

El emperador Agustín I Iturbide y su esposa Ana María Huarte. Retratos de Josephus Arias Huerta.

El día 27 de agosto, el general De la Garza envió una misiva dirigida al Emperador, firmada por el ayuntamiento de Soto la Marina, los electores e individuos de la diputación provincial, el párroco y oficiales de Nuevo Santander, en la que apoyaba los reclamos del Congreso.​ Iturbide consideró la misiva como una sublevación, giró órdenes al brigadier Zenón Fernández para presentarse en la zona y batir a de la Garza; después se le confirió el mando de la región Huasteca al coronel Manuel Gómez Pedraza. De la Garza fue hecho prisionero en Soto la Marina. En Ciudad de México, los diputados acusados de conspiración continuaron presos. El 27 de septiembre, Lorenzo de Zavala propuso ante el pleno reformar el Congreso, arguyendo la desigualdad de representación de las provincias, la necesidad de reducir el número de diputados y concluyendo que se requería realizar una nueva convocatoria. Sin embargo, la propuesta fue rechazada.

El 31 de octubre, Iturbide lanzó un decreto por el que se disolvió la Asamblea Constituyente, bajo el argumento de considerar “utópica” su labor. El general Luis Cortázar y Rábago fue el encargado de anunciar el decreto al presidente del Congreso, Mariano Marín. Él mismo dio un plazo de media hora para desalojar el recinto.​ Con el apoyo de 45 diputados, entre ellos Lorenzo de Zavala, y 8 suplentes, se creó una Junta Nacional Instituyente encargada de lograr una estabilidad política y económica. Para lograr estos objetivos, la Junta debería diseñar un método para la designación de los miembros de un nuevo Congreso, así como la creación de una Comisión de Hacienda, la cual estuvo a cargo de Mariano Larraguibel.

Este órgano dotó de un documento fundamental a la organización del país con la promulgación el 18 de diciembre del Reglamento Provisional Político del Imperio mexicano; dicho estatuto transitorio dio certeza legal a las disposiciones del emperador, que en el papel sería el máximo responsable del ejercicio de gobierno. El reglamento también establecía los mecanismos para la organización territorial, la impartición de justicia, la educación, la hacienda pública y la organización de un nuevo congreso constituyente.

Una vez instalada la Junta, los asuntos pendientes a resolver fueron las hostilidades por parte de Francisco Lemaur, comandante sustituto de García Dávila en San Juan de Ulúa, así como la revisión del tesoro imperial. Un préstamo fue negociado en Londres, el cual nunca llegó, y otro más con Diego Berry, pero tampoco pudo concretarse. Ante la difícil situación económica del erario, se impuso un préstamo de 2.800.000 de pesos con la hipoteca de una contribución general de todos los habitantes del imperio. También se prohibió la exportación de dinero a los españoles que querían migrar, y solamente se les permitió viajar con la ropa de uso y muebles necesarios. Otras medidas incluyeron la restricción de la libertad de prensa y penas contra conspiradores. Por otro lado, se determinó que no era factible lograr un presupuesto por 20.000.000 de pesos, de los cuales se necesitaban 1.500.000 para los gastos de la renta real. El déficit se intentó cubrir mediante el producto de la renta de tabaco y la captación de cuatro reales sobre todos los individuos de ambos sexos de 14 a 60 años de edad.​

Para solventar la falta de recursos y salvaguardándose en la fe pública, Iturbide tomó fondos de una conducta de plata de propiedad privada por una cantidad de 1.297.200 pesos, que se encontraba depositada en Perote y Jalapa; esta acción provocó el descontento de los comerciantes. Fue emitido papel moneda sin respaldo, y la Gaceta Imperial de México publicó el 31 de diciembre de 1822 el permiso de impresión hasta por un monto de 4.000.000 de pesos. Otra medida de Iturbide fue la autorización expedida a Stephen Austin, el 3 de enero de 1823, para colonizar Texas.

Revolución del Plan de Casa Mata

Desde que se unió al Plan de Iguala, Antonio López de Santa Anna mantuvo una relación estrecha con Iturbide, quien lo nombró gobernador militar de Veracruz. Entablaron comunicación y amistad personal por medio de correspondencia durante más de un año. En octubre de 1822, Santa Anna, sin flota y sin artillería pesada, pretendió tomar el fuerte de San Juan de Ulúa. Debido a que el proyecto era de especial interés, Iturbide giró órdenes al general José Antonio de Echávarri para supervisar las operaciones, pero todo se trataba de una cadetada y el plan fracasó.​ El 16 de noviembre, Iturbide se trasladó a Jalapa con el pretexto de tomar las precauciones necesarias para la toma de San Juan de Ulúa, pero en realidad quería destituir a Santa Anna y conducirlo a Ciudad de México.

Durante esos días la emperatriz había dado a luz a un nuevo príncipe y el emperador regresó a celebrar el acontecimiento. No obstante, requirió la presencia de Santa Anna en México, pero este se negó a asistir.​ De acuerdo a la crónica de Carlos María Bustamante, el manifiesto de Santa Anna fue trazado por el ministro plenipotenciario Miguel Santa María. Quien estaba por embarcarse a la Gran Colombia​ y había mantenido correspondencia con Joel R. Poinsett solicitándole interceder para que en Washington no se reconociera el gobierno de Iturbide.​

Quien fuera para Santa Anna el “amadísimo general”, “dignísimo y particularmente amado emperador”, se convirtió en “el déspota más injusto”, que en lugar de ser el libertador, se había convertido en un tirano. El 2 de diciembre, Santa Anna realizó una proclama a la población de Veracruz; entre sus enunciados destacaban:​

  1. Al emanciparse el país, se trató de buscar un gobierno fundado sobre los principios de igualdad, justicia y razón.
  2. México eligió desde el principio el gobierno representativo, a través del Congreso que ha sucumbido ante la fuerza.
  3. En nombre de la nación se proclama, en consecuencia, la República, bajo las condiciones que determine una asamblea representativa de la nación.

La respuesta del Emperador fue inmediata: destacó a los generales José Antonio de Echávarri. José María Lobato y Luis Cortázar para someter la sublevación. El día 3 de diciembre, Santa Anna lanzó un nuevo manifiesto, pero esta vez dirigido a la Gran Nación Mexicana. En el documento expresó sus protestas por la disolución del Congreso, por la vulneración de la inviolabilidad de los diputados y por la incautación de bienes de propiedad privada. Lo cual representaba quebrantar el juramento que el propio emperador había hecho.​ Desconcertado por las proclamas republicanas y por la agitación en Veracruz, Francisco Lemaur estableció comunicación con Santa Anna. Con el interés de proteger la fortaleza de San Juan de Ulúa, pronunció su posición contraria a la tiranía. Santa Anna se reunió con Lemaur y convino un armisticio de mutua conveniencia.​ Echávarri y Lobato consideraron este acto como una traición a la nación.

El 6 de diciembre de 1822, Guadalupe Victoria salió de su refugio para secundar el movimiento. Conociendo el prestigio y popularidad del exinsurgente, Santa Anna optó por entregarle la jefatura. Juntos proclamaron el Plan de Veracruz, el cual estaba conformado por diecisiete artículos principales y veintidós adicionales; entre los más importantes se proponía tener exclusividad de la religión católica, preservar la independencia, radicar la soberanía en el Congreso, declarar la nulidad de la investidura imperial de Iturbide por haber forzado la voluntad del Congreso y vigencia de la Constitución española hasta que el Congreso redactase una nueva.​

El día 9 de diciembre, Iturbide se dio cuenta de la peligrosidad ante la posible alianza de los rebeldes con los españoles de Lemaur. Al día siguiente, Santa Anna propuso a Echávarri unirse al movimiento republicano, pero el general consentido del emperador se negó. Hizo pública su respuesta el día 16 de diciembre, en la cual increpaba al rebelde como falso republicano, desenmascarando su intención velada de venganza contra el emperador, quien le había separado del mando de la provincia.​

El 21 de diciembre, Santa Anna realizó un avance hacia Jalapa, pero fue vencido por el general Calderón. Obligado a replegarse, el 24 de diciembre se reunió con un grupo de 300 efectivos de Guadalupe Victoria en Puente del Rey y retomó el mando de la rebelión. Echávarri recibió refuerzos para sitiar a los rebeldes, elevando su capacidad militar a 3.000 soldados; no obstante, retrasó el inicio del ataque. Probablemente fue a causa de conversaciones entabladas a través de la logia escocesa.​ El día 26 de diciembre, despreocupado en la capital, Iturbide participó en el bautizo de su hijo Felipe de Jesús Andrés María de Guadalupe, cuya ceremonia llevó a cabo el obispo de Puebla.​ Mientras tanto, Santa Anna aprovechó nuevamente la popularidad de Guadalupe Victoria arengando a la población para engrosar sus filas​ y nombrándolo nuevamente general en jefe del movimiento los primeros días de enero.​

El 5 de enero de 1823, los exinsurgentes Vicente Guerrero y Nicolás Bravo se trasladaron a Chilapa, en las montañas del sur, con la intención de sublevarse. Iturbide envió a Epitacio Sánchez y Gabriel de Armijo en su persecución. El 13 de enero de 1823, en el frente del sur, se desarrolló la batalla de Almolonga. Las fuerzas rebeldes fueron derrotadas, resultando gravemente herido Guerrero, pero Epitacio Sánchez murió durante el combate. A pesar del éxito de las fuerzas imperiales, la insurrección se extendió de manera incontenible hacia la zona de Oaxaca.

Todavía el 22 de enero, Santa Anna reportó a Guadalupe Victoria haber sido atacado por los cuatro puntos cardinales por las fuerzas imperiales. Pero un giro radical aconteció cuando los generales Echávarri, Lobato y Cortázar firmaron el 1 de febrero de 1823 el Plan de Casa Mata. De acuerdo a Lucas Alamán, la razón de este cambio de ideología obedeció a la influencia de las logias masónicas; de acuerdo a Santa Anna, se debió al apoyo de Lemaur​ y, de acuerdo a los análisis de Nettie L. Benson: «Un trabajo fundamental ya había sido preparado, probablemente tras bambalinas, por Miguel Ramos Arizpe y José Mariano de Michelena».

Abdicación de Iturbide

El Plan de Casa Mata estuvo conformado por once artículos; sus principales bases fueron: la formación de un nuevo Congreso; los antiguos diputados podrían ser reelectos o sustituidos; se circularía a cada jefe del ejército una copia del plan; las diputaciones provinciales ejercerían el control administrativo de las provincias y se prohibió atentar contra la persona del emperador. El documento fue enviado a todas las provincias y fue adaptado con gran celeridad.​ Con la propuesta descrita en el plan para elegir nuevos miembros del Congreso, enemigos y amigos de Iturbide estuvieron de acuerdo en dicha convocatoria.

Tras la abdicación de Iturbide, cada diputación asumió la jurisdicción administrativa y política de su zona, estableciendo un sistema federal de facto y mermando el poder central.​ Durante esos días había llegado a Ciudad de México el capitán comanche Guonique y un jefe de la tribu cheroqui para celebrar tratados de paz con el Imperio, pues sus pueblos habían sido forzados a salir del territorio de los Estados Unidos. Guonique se comprometió a colaborar con 20.000 hombres para apoyar a Iturbide, pero todo resultó ser un embuste.

El 4 de marzo, Iturbide expidió un decreto para restaurar el Congreso; tres días más tarde los diputados se reunieron. El Emperador asistió a la primera reunión pronunciando un discurso en el que protestó obsequiar la voluntad general, recomendó al Congreso elegir el lugar que estimase conveniente para su residencia, así como proveer recursos para las tropas pronunciadas, y concluyó por encarecer la conveniencia de una amnistía para olvidar los agravios y errores pasados.

El 19 de marzo de 1823, el secretario de Justicia Juan Gómez Navarrete comunicó por medio de una carta la abdicación de Iturbide.

El 26 de marzo se realizó una junta de guerra en la que participaron el marqués de Vivanco, Echávarri, Bravo, Barragán y otros oficiales. Se determinó que Iturbide saliese con su familia escoltado por el general Nicolás Bravo, tal y como lo había solicitado el propio exemperador.​

Agustín Iturbide escoltado por Nicolás Bravo camino del destierro

Aun después de realizada la abdicación, hubo choques entre la población cuando entró el llamado Ejército Libertador a Ciudad de México, que fue recibido en la ermita de San Antonio por grupos armados y el populacho. Pero todo fue inútil; el fraile Aguilar, que encabezaba a un grupo, tuvo que refugiarse en el convento de La Merced y el sargento Pío Marcha fue apresado en el Salto del Agua.​

El Congreso se reunió y confió el Poder Ejecutivo a un triunvirato, en el que llegaron a turnarse los generales Pedro Celestino Negrete, Nicolás Bravo, Vicente Guerrero y Guadalupe Victoria; como suplentes, Miguel Domínguez y Mariano Michelena. El 7 de abril de 1823, el Congreso declaró la coronación de Agustín de Iturbide como obra de violencia y de la fuerza y de derecho nulo. Asimismo, el Congreso declaró que en ningún tiempo hubo derecho para obligar a la nación mexicana a sujetarse a ninguna ley ni tratado; en consecuencia, consideró no subsistentes el Plan de Iguala y el Tratado de Córdoba, quedando en absoluta libertad para constituirse en la forma de gobierno que más le acomodase.

Vicente Filisola fue avisado de la proclama del Plan de Casa Mata.

Exilio de Iurbide

El Congreso asignó una pensión anual de 25.000 pesos a Iturbide, con la condición de que estableciera su residencia en cualquier lugar de Italia. También su familia tendría el derecho de la pensión que las leyes designasen en caso de muerte del exemperador.​ El 9 de mayo, Iturbide llegó a la desembocadura del río La Antigua, Veracruz, y Guadalupe Victoria acudió a despedirlo. El exemperador, como muestra de gratitud y reconocimiento, quiso regalarle un reloj. El exinsurgente no lo quiso admitir y le dio a cambio un pañuelo de seda, el cual guardó hasta el momento de su muerte.​ El 11 de mayo de 1823, Iturbide, en compañía de su esposa, ocho hijos y 19 sirvientes, se embarcó en la fragata inglesa Rowllins con destino a Europa.​ Asimismo, solicitó protección por temor a ser atacado por un barco pirata o un barco español.

Agustín Iturbide parte hacia el exilio en 1823.
Iturbide en un barco con su familia dirigiéndose al exilio.

El Congreso invitó a regresar al ministro plenipotenciario de Colombia, Miguel Santa María, a pesar de que este había sido señalado como autor del Plan de Veracruz. Además, mandó eliminar la corona del águila que tenía el escudo nacional, declaró nulo el nombramiento de los ministros del Supremo Tribunal de Justicia y sacó de circulación el papel moneda de Iturbide.​ Se expidió un decreto para declarar buenos y meritorios los servicios hechos a la patria durante los once primeros años de guerra de independencia a Miguel Hidalgo, Ignacio Allende, Juan Aldama, Mariano Abasolo, José María Morelos, Mariano Matamoros, Miguel Bravo, Hermenegildo Galeana, Xavier Mina, Pedro Moreno y Víctor Rosales.

Aprehensión y muerte de Iturbide

El 4 de mayo de 1824, Iturbide se embarcó en el bergantín inglés Spring, lo acompañaron su esposa, dos de sus hijos menores, Ramón Malo, el padre José López, el padre José Treviño, el italiano Macario Morandini, el impresor inglés John Armstrong y el coronel polaco Carlos Beneski, quien había sido partícipe durante las campañas mexicanas. Llevaba consigo una prensa, documentos personales y un manifiesto que dirigiría al pueblo de México.​

El 14 de julio, la embarcación ancló en la barra de Soto la Marina. Beneski descendió de la nave para presentarse con el comandante militar Felipe de la Garza y le mostró una carta del padre Treviño, en la cual se le recomendaba para proponer al gobierno mexicano un proyecto de colonización irlandesa. De la Garza preguntó por Iturbide; el polaco contestó que el exemperador se encontraba en Londres con su familia; de esta forma se autorizó el desembarco.

El 15 de julio, Iturbide, en compañía de Beneski, cabalgó por Soto la Marina, y fue reconocido por el Tcol Juan Manuel Azúnzolo y alcalde. Confirmada la sospecha, el día 16, el cabo Jorge Espino realizó la detención de los viajeros en un lugar llamado Los Arroyos.​

Detención de Iturbide la hacienda de Palo Alto, jurisdicción de Santillana, Nuevo Santander el día 18 de julio de 1824. Autor José L. Aguilar Guajardo.

De la Garza se entrevistó con ambos. Iturbide le explicó que había viajado a México para ofrecer sus servicios a la patria; el comandante le notificó que se encontraba fuera de la ley conforme al decreto expedido por el Congreso el 28 de abril. También le reclamó el engaño a Beneski, quien respondió que era militar y que había procedido de acuerdo a las órdenes recibidas.

De la Garza trasladó a Iturbide a Padilla, en donde se encontraba sesionando el Congreso local del recién creado estado de Tamaulipas. El gobernador era Bernardo Gutiérrez de Lara, quien había simpatizado con Hidalgo y Morelos, dirigiendo a un grupo de insurgentes en la zona de Texas. En su defensa, Iturbide arguyó la posible invasión que se preparaba con ayuda de la Santa Alianza, pero nadie le creyó. El Congreso local ordenó cumplir el decreto federal.

Fue fusilado en Padilla, Tamaulipas, el 19 de julio de 1824; previo a su ejecución, repartió entre los soldados que se encontraban presentes las onzas de oro que llevaba consigo; con voz clara los arengó pronunciando que moría con gusto por morir entre ellos, que moría con honor y no como traidor. Aceptó que se le vendaran los ojos, y de frente al pelotón de fusilamiento esperó la descarga que impactó en su cabeza y el pecho.

Fusilamiento de Agustín de Iturbide en Padilla, Tamaulipas el 19 de julio de 1824. Litografía atribuida a Santiago Hernández.

Sus restos fueron enterrados en Padilla, y el nombre de Iturbide permaneció proscrito y sus cenizas olvidadas, hasta el año de 1833, en que, siendo presidente el general Santa Anna, investido de facultades extraordinarias, mandó por decreto de 3 de noviembre que los restos de Agustín de Iturbide fueran conducidos a la Ciudad de México y conservados en una urna reservada a los primeros héroes de la independencia. Esta sería la primera rehabilitación de su memoria. Sin embargo, en 1833, bajo la presidencia de Anastasio Bustamante, el Congreso ordenó su traslado y su inhumación con honores en la capilla de San Felipe en la catedral.

Entrada creada originalmente por Arre caballo! el 2025-11-12. Última modificacion 2025-11-12.
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