Batalla de Ankara o de Angora (1402)

La batalla de Ankara (o de Angora), sucedió el 20 de julio de 1402 entre Bayaceto I, sultán del Imperio otomano y Tamerlán o Timür, líder militar del Imperio timúrida, tuvo lugar en la llanura de Çubuk, al noroeste de la ciudad de Ankara, en Anatolia, Turquía.

Antecedentes

Tamerlán (Timür Lang o Timür el Cojo), en 1369 se proclamó rey independiente de Traxonia, alegando su condición de heredero de Gengis Kan, de quien probablemente descendía su padre por línea materna.

Desde su nueva posición de poder, Timür logró someter los reinos vecinos, antiguos vasallos del kan. Instauró entonces una política militar, invadiendo muchos reinos y territorios.

Entre 1379 y 1387 sometió la Persia oriental, derrotando al rey de Isfahán y donde se dice que mandó matar a más de 70.000 personas.

Saqueó Azerbaiyán, Georgia, Armenia y Mesopotamia septentrional, donde la ciudad de Bagdad se entregó sin resistencia. Regresó luego a la Transoxiana, donde aplastó una insurrección en su contra.

En 1.392 y 1393, invadió nuevamente Persia y Mesopotamia, hizo asesinar brutalmente a los habitantes de Bagdad y llegó hasta Siria, donde arrasó Alepo y Damasco, que eran gobernadas por el sultán mameluco de Egipto. En 1.398 decidió conquistar la India, donde sus ejércitos saquearon la ciudad de Delhi. Tamerlán llegó hasta el Ganges, antes de regresar a la Transoxiana.

El sultán otomano Bayaceto I (Beyazid) I apodado el Rayo cometió un error. En 1400, intentó imponer su soberanía sobre el emir Taherten, súbdito de Tamerlán. Este le tenía gran aprecio por su labor como guardián de sus fronteras en el Asia Menor, y le había regalado un elefante que había capturado en su campaña a la India, el emir gobernaba en Erzincan y Erzurum. Para ello, Bayaceto se valió de Kara Yusuf, jefe de la horda de las Ovejas Negras y enemigo de Tamerlán.

En apoyo de su vasallo, Tamerlán se dirigió al Asia Menor en agosto de 1400. Pero mientras Tamerlán guerreaba con los mamelucos en Siria, Bayaceto tomó Erzincan, capturando a la familia de Taherten.

Tamerlán no tomó represalias de inmediato, sino que pasó el invierno de 1401/2 en Karabaj, y la primavera de 1402 en las fronteras de Georgia, para invadir finalmente el Imperio otomano en junio de 1402.

Pasó por Erzurum y Erzincan con el objetivo de recuperar la disputada fortaleza de Kemah, donde se controla el alto Éufrates y que había sido arrebatada a Taharten, por Bayaceto I, la fortaleza cayó en cuestión de diez días y regresó a su antiguo señor. De allí se dirigió a la planicie de Sivas donde se encontró con mensajeros otomanos.

Timür exigió la rendición de Ahmed Jalair, el sultán fugitivo de Bagdad, y de Kara Yusuf, gobernante de los turcomanos de los Karakonyulu (Ovejas Negras). Ambos se encontraban refugiados con los otomanos. Sin embargo, los mensajeros del sultán le informan de que Bayaceto I no pensaba aceptar sus exigencias. Ante este fracaso de la diplomacia, decidió continuar su marcha hacia Anatolia.

Movimientos previos

Tamerlán pasó revista a sus tropas en Sivas, y avanzó hacia Ankara siguiendo el río Kizilirmak. Llegó a Ankara y puso sitio a la ciudad.

Al enterarse de la llegada del ejército timúrida, el sultán otomano levantó el sitio de Constantinopla y marchó hacia el este para enfrentarse a Tamerlán. El ejército de timúrida se había movido con bastante rapidez al oeste, llegando a la ciudad de Ankara o Angora, poniéndola bajo asedio.

Coincidentemente, la fuerza de Bayaceto ya había pasado por Ankara y se dirigían hacia el Este en busca del ejército timúrida.

Sin embargo, los exploradores de Bayaceto pronto informaron de que los timúridas estaban asediando Ankara o Angora esencialmente detrás de él. De hecho, los timúridas estaban usando el mismo campamento que los turcos habían usado recientemente en su marcha hacia el este.

Los otomanos dieron la vuelta inmediatamente, y a marchas forzadas se dirigió al invasor.

Tamerlán levantó el asedio cuando los exploradores trajeron la noticia de que se acerca el ejército otomano, reubicándose a varios kilómetros al noreste de Ankara, cerca de la ciudad de Bar. Las fuentes otomanas subrayan que el ejército de Bayaceto estaba exhausto debido a la larga marcha forzada desde Bursa a Sivas y Tokat, y de nuevo de vuelta a Ankara, en persecución del enemigo.

Además de su inferioridad numérica y de su estado de extenuación, otro factor que debilitó considerablemente a los otomanos fue la falta de agua, un gran inconveniente si se tienen en cuenta las altas temperaturas del verano en Anatolia. Tamerlán destruyó los pozos situados en torno a Ankara. Además, desvió el río Cubuk, que atraviesa la llanura del mismo nombre, construyendo una presa y un embalse al sur de la ciudad de Cubuk. De este modo, las fuerzas de combate otomanas y sus caballos no disponían de agua para beber.

Cuando el ejército otomano se acercó al campo de batalla, sediento, y casi agotado por varios días de marchas forzadas calientes, se encontraron con las fuerzas timúridas dispuestas en orden de batalla a lo largo de las orillas del río Cubuk, al sur de la ciudad.

Su mayor sorpresa fue cuando vieron que su principal fuente de agua se había reducido al mínimo, y que estaba a punto de desaparecer por completo. Frenéticamente en busca de una fuente alternativa, los otomanos encontraron un solo pozo, que por supuesto había sido contaminado por los timúridas. Sin ninguna otra fuente de agua disponible, la moral del ejército otomano se desplomó. Bayaceto se encontraba junto al pueblo de Meliksah mientras que Tamerlán estaba cerca de la aldea Saraykoy.

A la mañana siguiente ambos jefes decidieron poner sus ejércitos en orden de batalla, era el viernes 28 de julio de 1402.

Despliegue inicial

Bayaceto desplegó primero para elegir el terreno, apoyó sus flancos con obstáculos naturales, derecho con en el monte Mire y el izquierdo en el río Cubuk, con el fin de evitar la superioridad de la caballería timúrida. Desplegando sus 85.000 efectivos a la manera tradicional otomana, esta vez al estar en Asia, los anatolios desplegaron a la derecha:

• Ala izquierda mandada por el príncipe Solimán Çelebi hijo mayor de Bayaceto, con las fuerzas provinciales de Rumelia (20.000) mandadas por su beyler bey Hoca Firuz y la caballería kara-tártara (Ovejas Negras que posteriormente desertarían); desplegó una fuerza de cobertura de akincis, y la infantería azab delante, y detrás la caballería tamariot y tártara.
• El centro mandado por Bayaceto ayudado por su gran visir Alí pachá, con los jenízaros e infantería azab (10.000) mandados por Hasan Haga, los jenízaros se situaron en el centro y los azabs en los flancos), y delante una cobertura de arqueros a pie, ocupado una elevación denominada Catal que dominaba el valle del Cubuc. Detrás la caballería kapikuli mandada por sus tres hijos (Musa, Mustafá e Isa).
• El ala derecha mandada por el serbio Esteban Lazarebic, con las fuerzas provinciales de Anatolia mandadas por su beyler bey Kara Timurtaş Pasha y la caballería serbia. Desplegó con una cobertura de akincis, infantería azab delante y la caballería tamariot y serbia detrás.
• La retaguardia estaba mandada por el príncipe Mehmet Çelebi, con fuerzas de caballería procedentes de Sivas, Tokat y Amasya.

El ejército de Tamerlán era muy parecido al mongol, y empleaba la formación decimal de los mongoles (unidades de 10, 100, 1000, 10.000 efectivos) desplegó en ocho divisiones o tumenes de 10.000 jinetes, más infantería que eran principalmente milicias urbanas o sarbadar y habitantes de las montañas y cuerpos auxiliares o hashar principalmente ingenieros. En total eran unos 120.000 efectivos combatientes, que sumados a los no combatientes alcanzarían los 150.000; contaba también con 32 elefantes que había conseguido en su campaña en la India y que estaban recubiertos por una coraza metálica.

Los tumenes de caballería siguiendo la costumbre mongola 60/40 serían 5 tumenes de caballería ligera-media cuyas armas principales eran el compuesto arco, lanza, maza y espada; los otros 3 tumenes serían de caballería pesada con una cota de malla o armadura laminar, casco cónico metálico y escudo, los caballos también estaban protegidos con cuero o laminar metálica, como armas empleaban lanza, espada o maza. Desplegó sus fuerzas en:

• Ala izquierda dos tumenes de caballería ligera-media mandada por Rukh Shah Mirza, de 24 años de edad, el hijo menor de Tamerlán, con el sultán Hüseyin.
• Centro mandado por Mahmutoğlan, kan de Chagatai, comprendía los 32 elefantes de guerra escoltados por infantería ligera y un tumen de caballería ligera-media y otro de caballería pesada precedentes de Samarcanda, detrás infantería pesada, con Ömer Shah.
• Ala derecha con dos tumenes de caballería ligero-media, estaba mandada por Miran Shah, el tercer hijo de Tamerlán, con el sultán Ebubekir.
• Retaguardia formada por dos tumenes de caballería pesada estaba mandado por el sultán Muhammad. Estaban entre el centro y la ciudad de Ankara, que aún tenía guarnición otomana.

Desarrollo de la batalla

Sobre las 10:00 horas comenzó la batalla, y las alas del ejército de Tamerlán cargaron contra las alas del ejército otomano. La derecha otomana de Lazarević consiguió detener el ataque y comenzó a hacer retroceder las fuerzas de Shahrukh, Lazarević se alejó demasiado del resto de la fuerza y Bayaceto le ordenó regresar antes de que pudiesen cortarle la retirada.

En la otra ala otomana la historia era diferente. Los turcos de Anatolia bajo Solimán Çelebi cedieron terreno inmediatamente, y peor aún, la caballería kara-tártara de Karaman, Aydin y Menteshe vieron a los estándartes de sus antiguos señores en filas las de Tamerlán y cambiaron de bando, cayendo sobre las fuerzas otomanas leales. Esto probablemente no fue una coincidencia, ya que los agentes de Tamerlán habían estado intrigando en Anatolia. Solimán Çelebi, que sentía que estaba perdiendo la batalla, comenzó a retirarse con sus fuerzas leales. Bayaceto envió de inmediato la reserva del príncipe Mehmet Çelebi para estabilizar ese ala.

En el centro Bayaceto se mantuvo firme con sus jenízaros, y cuando los arqueros montados atacaron, la respuesta de los arqueros a pie fue mucho más precisa, consiguiéndoles hacer retroceder.

Detrás llegaron los elefantes y caballería pesada de Samarcanda y la infantería pesada que consiguieron romper la línea de los jenízaros y azab. Bayaceto consiguió estabilizarla utilizando la caballería kapikuli, en este momento todo el ejército otomano estaba comprometido.

Timür entonces cargó con sus divisiones de reserva, el diezmado ejército otomano no pudo hacer nada para contenerlos.

Sería medio día cuando Lazarević pidió a Bayaceto que se retirara, pero este se negó. Finalmente, al atardecer cuando todo el ala izquierda otomana se dio a la fuga, seguida por los jinetes del centro, y solo quedaban Lazarević y los jenízaros, Bayaceto decidió retirarse hacia la colina Cataltepe, toda la colina fue enseguida rodeada por decenas de millares de jinetes timúridas.

A últimas horas de la tarde, Bayaceto logró romper el cerco y se marchó hacia el norte con un grupo de hombres. Aproximadamente 16 kilómetros al norte de la Cataltepe, su caballo tropezó y cayó al suelo. Los jinetes timúridas le perseguían tan estrechamente a las órdenes de Chagatai Mahmud, que no le dio tiempo a cambiar de caballo, siendo capturado junto con uno de sus hijos.

Secuelas de la batalla

Las bajas debieron ser muy importantes sobre todo para los otomanos, no hay cifras fiables pero se pueden estimar en 15.000 timúridas y 25.000 otomanos.

Lo qué sucedió después de la batalla lo sabemos por la crónica de dinastía de Timür Lenka, gobernador de Samarcanda, que se guarda en la biblioteca de la mezquita en Samarcanda. La cita dice: «Los del ejército de Bayaceto que no murieron, cayeron en esclavitud para Amir Timür Gurgen (Gurgen en persa significa el sepulturero) 10.000 tesalianos y tracios, 15.000 árabes, 9.000 tártaros y 8.000 serbios. Amir Timür ordenó con su justa ira que de los tesalianos y tracios se matasen a todos, de los árabes uno de cada dos, de los tártaros uno de cada cinco, y de los serbios a ninguno. Porque, Timür Gurgen dijo que nunca había visto héroes más grandes, ni siquiera en Mongolia, en Norasma, en Persia, en Armenia, en el Volga Ruso, en la India. Los que no fueron muertos fueron esclavizados. Se ordenó que los serbios fueran liberados y enviados a sus hogares con sus armas, caballos y equipos. No quiso liberar 70 serbios que eran habilidosos constructores de puentes, torres y templos; porque los griegos, que llegaron desde Constantinopla con regalos, le dijeron que los serbios eran buenos como maestros de Venecia. Así fue como el emir Timür Gurgen trajo desde Angora a Samarcanda de 70 constructores y maestros serbios … «. Las cifras puede que estén algo infladas, pero nos dan una idea de los que sucedió después de la batalla.

Bayaceto I fue encerrado en una jaula portátil de hierro para su transporte, llevado a Samarcanda donde quedó en cautiverio, esperando que sus hijos pagaran el rescate, muriendo meses más tarde en 1403.

Esteban Lazarevic, se dirigió Constantinopla y el emperador bizantino le nombró déspota (primer título debajo del emperador). Canceló el vasallaje de Serbia con los otomanos.

Tamerlán quedó como el amo indiscutible de Anatolia y restaurado a sus antiguos emiratos turcos vasallos. El territorio otomano queda reducido a Bitinia y a una parte de Frigia. También hizo los arreglos para los príncipes otomanos continuasen en emiratos menores bajo su señorío, a Solimán Çelebi se le otorgó los territorios de los Balcanes. Tamerlán también tomó el último enclave de los cruzados en Asia, la fortaleza de los caballeros de San Juan en Esmirna, cuyo asedio fue seguido de una masacre.

Solimán Çelebi firmó el tratado de Galípoli con el regente bizantino Juan VII Paleólogo en 1403. Con este tratado, cedió territorios junto a la costa del mar de Mármara al Imperio bizantino a cambio del apoyo bizantino. Se proclamó Sultán en la ciudad de Edirne, la capital de Rumelia. Sin embargo, Anatolia estaba bajo control de sus hermanos İsa Çelebi y Mehmet Çelebi (futuro Mehmet I). Solimán apoyó a İsa contra Mehmet. Después de una guerra civil murió en 1411 asesinado, y Mehmet I subió al trono, recuperando todos los territorios de su padre.

En Samarcanda, Tamerlán lleva a cabo un gran kurultái, justificado para la elección de un nuevo kan títere para suceder a Muhmād Qan b. Soyurghatmish, fallecido en 1402. A él asisten numerosas embajadas, incluyendo la de China y la de Ruy González de Clavijo, enviado de Enrique III de Castilla. Después de unos pocos meses en la capital, comenzó los preparativos para la hazaña más grande: una campaña contra China. Con 70 años reunió un enorme ejército y grandes cantidades de suministros, y a fines del otoño de 1404 se dirigió a Utrar, donde planeaba invernar. Allí murió el 19 de enero de 1405 a causa de una enfermedad. Su cuerpo fue retornado a Samarcanda y enterrado en el mausoleo de Gur-e Amir. Un equipo arqueológico soviético exhumó su cuerpo el 22 de junio de 1941. Reconstruyó su rostro y halló que, efectivamente, era cojo y singularmente alto y fornido para su tiempo (1,72 m de altura).

Final del Imperio timúrida

Después de su muerte en 1405, la familia rápidamente cayó en disputas y guerras civiles, y muchas de las gobernaciones se hicieron efectivamente independientes. Sin embargo, los gobernantes timúridas continuaron dominando Persia, Mesopotamia, Armenia, gran parte de Azerbaiyán, Afganistán, Pakistán, pequeñas partes de la India, y gran parte de Asia Central, aunque los territorios de Anatolia y del Cáucaso se perdieron en la década de 1430. Debido al hecho de que las ciudades persas fueron desoladas por las guerras, la sede de la cultura persa estaba entonces en Samarcanda y Herat, ciudades que se convirtieron en el centro del renacimiento timúrida. El costo de las conquistas de Tamerlán equivale a la muerte de posiblemente 17 millones de personas.

Shahrukh Mirza, el cuarto gobernante de los timúridas, se enfrentó con Kara Koyunlu, que tenía como objetivo expandirse a Irán. Pero, Jahan Shah (bey de Kara Koyunlu) empujó a los timúridas al este de Irán en 1447 y ocupó brevemente Herat en 1458. Tras la muerte de Jahan Shah, Uzun Hasan, bey de la Ak Koyunlu, conquistó y mantuvo los territorios de Kara Koyunlu en Irán entre 1469 y 1471.

Hacia 1500, el Imperio timúrida fue dividido y destruido por la guerra había y perdió el control de la mayor parte de su territorio, y en los años siguientes fue efectivamente rechazado en todos los frentes. Persia, el Cáucaso, Mesopotamia y Anatolia Oriental cayeron rápidamente a la dinastía safávida chiíta, asegurada por Shah Ismail I en la década siguiente. Gran parte de las tierras de Asia central fue invadida por los uzbekos de Muhammad Shaybani, que conquistaron las ciudades clave de Samarcanda y Herat en 1505 y 1507, y que fundaron el kanato de Bukhara (Bujará). Desde Kabul, el Imperio mogol fue establecido en 1526 por Babur, un descendiente de Timur a través de su padre y posiblemente un descendiente de Genghis Kan a través de su madre. La dinastía que estableció se conoce comúnmente como mogola.