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Origen de Temuyín
El pueblo mongol estaba situado en el noroeste de China, en torno al lago Baikal y al macizo del Altai. Divididos en tribus de pastores nómadas que trashumaban con sus carros y tiendas desmontables detrás de sus rebaños, mientras otros grupos se dedicaban a la caza en la taiga siberiana. Los mongoles protagonizaban frecuentes enfrentamientos internos por el control de los territorios de caza y pastos y por el rapto de mujeres de otros clanes (para mantener la exogamia y la poligamia y evitar el pago de fuertes dotes al padre de la joven). El propio carácter belicoso de estos pueblos no favorecía su estabilidad.
Su estructura social, fuertemente jerarquizada, reflejaba el predominio de rasgos militares: sobre el conjunto de la clase de los guerreros se elevaba una aristocracia que constituía la minoría dirigente y que se encargaba de la elección del jefe de la tribu llamado kan (khan o jan). Ocasionalmente, se elegía un jefe supremo del pueblo mongol, es decir, un Gran Kan.
Temuyín o Temudjín nació en abril del 1162 y pertenecía al poderoso clan Borjigin y era hijo de Yesugei y nieto de Qabul, un noble que había hostilizado las fronteras del imperio chino de Jin de los junchen y recibido de ellos el título de kan.
Como descendientes de Qabul Kan, el clan de Temuyín tenía un alto rango, aunque no parece haber ejercido un poder muy amplio debido a que los mongoles no eran uno de los pueblos más poderosos en la estepa. Sin embargo, la favorable situación de Temuyín y de su clan se vio truncada por la muerte de Yesugei, envenenado por los tártaros, y el consecuente abandono de los clanes que apoyaban a Yesugei, debido a que por aquel entonces el heredero no tendría más de diez años.
A partir de este momento la familia de Temuyín (él, su madre y sus seis hermanos), se vieron abocados a vivir en la indigencia, alimentándose de la recolección agrícola y de la pesca, agravado esto por la persecución a la que se vieron sometidos por los clanes rivales; especialmente el de los tai-eschutos, cuyo jefe Tartugai aspiraba al posible kanato dejado vacante por la muerte de Yesugei, y que le hizo prisionero y le ató a un yugo para venderle como esclavo. El niño consiguió escaparse.
Hermanos de Sangre
En este período, mediante la participación en razzias, entre otras actividades, comenzó a adquirir fidelidades de otros individuos jóvenes, muchas veces en su misma situación, que se unieron a él. Para ello utilizó el anda o “hermano de sangre”. Consistía en pincharse un dedo y mezclar la sangre, para forjar una hermandad. Su más fiel compañero fue el primero que se unió a él mediante el anda fue Boghurtschi, el cual cabalgó con él en su juventud ayudándole a arrancar a los bandidos tai-eschutos sus ocho caballos, la única fortuna que tenía en ese momento.
Otro anda importante fue con Jamukha o Jamuja, un joven de sangre noble, cuya posición le ayudó en cierta medida a subir posiciones en la carrera hacia el poder, aunque más tarde, celoso de su amigo de la infancia, se volvió en su contra.
Así se comenzó a formar el núcleo de lo que en un futuro sería su guardia imperial. Pero el más importante fue el de un antiguo aliado de su padre que había sido anda de éste: Toghril, kan de los keraitas, un pueblo sedentario que tenía ciudades de adobe, que le aceptó como un jefe de segunda fila. Su posición ahora favorable, unida su magnetismo personal de Temuyín, le proporcionó la adhesión voluntaria de aún más hombres a sus filas. La alianza militar fue sancionada y sellada con el matrimonio entre Temuyín y una de las hijas del kan Toghril, llamada Bordu.
En este momento se produce un incidente que va a afianzar aún más el poder de Temuyín: su mujer Bordu fue raptada por un clan merkita, pero ya entonces Temuyín estaba en condiciones de pedir apoyo militar a su suegro y Jamukha se suma con su clan a una ofensiva. Mediante una simple estrategia: no dejar a sus espaldas ningún enemigo que pudiera atacarlos, pasó a cuchillo al clan merkita y los pocos sobrevivientes que se libraron fueron vendidos como esclavos. Tras esta primera victoria tan resonante, Temuyín se hizo famoso como guerrero, y muchos hombres acudieron para alistarse bajo su mando.
Campañas de unificación
Temuyín, partiendo de su pequeño territorio y con una gran tenacidad, consiguió dominar entre 1198 y 1206 a todos las tribus mongolas.
Después de la victoria sobre los merkitas, Temujin se sintió seguro de sus fuerzas y en 1.198 decidió atacar a su gran enemigo Turtugai jefe del clan de los tai-eschutos, y que ocupaba las tierras de sus antepasados. Había logrado reunir un ejército de unos 13.000 mongoles, compuesto de jinetes y arqueros muy bien entrenados, con los que se enfrentó a un poderoso contingente de 30.000 soldados reunidos por Tartugai, al que infligió una severa derrota empleando el valor y la astucia.
Esta victoria despertó la envidia de sus aliados Toghril y Jamukha. Cada vez eran más los nobles que aclamaban a Temuyin como jefe, por lo que la ruptura con sus aliados se precipitó. En 1197 rompió el pacto con Toghril, dispersando a sus keraitas entre las diferentes tribus mongolas y utilizándolos como siervos y soldados.
La suerte de Jamukha no fue muy diferente. El antiguo amigo de infancia de Temuyín era ambicioso y, al romper la coalición, conformó alianzas para apoderarse de las tribus.
En el 1202, con un ejército cada vez más numeroso, se dirigió a los territorios del sur, ocupados por pueblos nómadas tártaros, a los que derrotó, uno tras otro. El emperador chino, enemigo acérrimo de los tártaros, concedió a Temuyín el título de Tschao-churi (jefe absoluto de los territorios fronterizos).
En el año 1203, Temuyín decidió deshacerse de su antiguo y valioso aliado, el kan Toghril, que al parecer estaba conspirando contra él. Temuyin atacó por sorpresa a la tribu de los keraitas. Una vez acabado con estos sometió a la tribu de los naimanos que habían dado refugio a Jamukha y sus seguidores. En el 1204, varias tribus proclaman a Temuyín rey de Mongolia, pero otras se negaban a reconocerlo. Se inició la guerra contra la coalición de Jamukha. Las múltiples victorias confirmaron en el mando a Temuyín, quien poco a poco logró apoderarse de casi todas las tribus mongolas. Fue en el año 1206, en una asamblea de todas las tribus mongolas junto al río Onon, se le nombró Gran Kan adoptando el nombre de Gengis o Ghengis (significa océano). Lograda la unificación y teniendo ya un ejército consolidado, el nuevo soberano emprendió su empresa más ambiciosa: la conquista de los imperios vecinos.
Tras su coronación, el Gran Kan ordenó liberar a todos los esclavos de origen mongol que serían reemplazados por otros de origen chino y persa de las campañas posteriores. También ordenó crear escuelas de medicina con sabios chinos y luego persas. Había conseguido unificar las tribus, pero pronto comprendió, que la fidelidad de cada individuo de una tribu, era para su jefe tribal. Gengis Kan, deseaba una fidelidad de los individuos tribales hacia su persona, usando un concepto más amplio: Mongolia. Para conseguirlo, Gengis Kan, inicio una política de dispersión de los líderes tribales y el reclutamiento de los soldados en unidades que eran controladas por personal de su confianza.
Gengis Kan, después de unificar Mongolia, inició una serie de campañas de expansión, en el 1209 invadió el Imperio de Xi Xia o Tangut, en el 1211 invadió el Imperio de Kara Kitán, del 1211 a 1215 invadió el Imperio Jin o Jurchen, y finalmente invadió Europa del 1222 al 1223.