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Batalla de Château-Thierry (12 de febrero de 1814)
Durante la noche, las tropas de la coalición se habían desplazado hacia Château-Thierry por caminos embarrados. El general Yorck ya había dejado allí su artillería pesada el día anterior, así como una parte importante de sus tropas, que habían aprovechado el tiempo para construir un segundo puente (de barcos) para cruzar el Marne.
El general Yorck pasó la noche cerca del pequeño pueblo de Viffort, donde el general Osten-Sacken se reunió con él a la mañana siguiente. El general Sacken era el oficial superior y tenía el mando supremo en las operaciones conjuntas. Decidieron continuar la retirada hacia Château-Thierry, donde pretendían cruzar el río Marne.
A primeras horas del 12 de febrero, los prusianos estaban en Montfaucon, a unos 11 km al sur de Château-Thierry (a mitad de camino entre este pueblo y Montmirial). Los aliados situaron a la DM avanzada Katzeler detrás del arroyo Dollair entre Essises y Viffort, al norte situó la infantería con la BRI-I/18/VI rusa de Heidenreich (RIs Tambov y Kostroma) al oeste (derecha), la DM-7/I de Horn en el centro sobre la carretera y la DM-1/I de Steinmetz (Pirch había sido herido en Montmirail) al este (izquierda), a retaguardia (norte) situó el CEC ruso de Vasiltchikov sobre la carretera y la caballería prusiana de Reserva de Wahlen-Jurgass al nordeste. Los restos del cuerpo ruso de Sacken, después de marchar toda la noche, llegaron allí en la madrugada del día 12, atravesaron la línea prusiana para cruzar el Marne en Château-Thierry.
Napoleón dejó descansar a sus tropas esa noche y él mismo las pasó en una granja. Esa noche envió un mensajero a MacDonald, que estaba con sus tropas en Meaux, 51 km más al oeste por el Marne, y le ordenó que marchara inmediatamente por la orilla norte del Marne hasta Château-Thierry para evitar que las fuerzas de la coalición cruzasen el río.
Al día siguiente 12 de febrero, la situación de Napoleón era la siguiente: el mariscal Marmont estaba en Etoges, desde donde observaba a Blücher que no mostraba intención de retirarse; MacDonald estaba bloqueado en Meaux en la margen derecha del río Marne, por la destrucción del puente en Trilport, e incapaz de reunirse con el Emperador, pero había enviado su caballería al mando de Saint-Germain (2.500) para unirse a Napoleón; los aliados tomaron dirección al río Sena, pero los franceses todavía tenían Pont-sur-Yonne, así como Nogent, ocupada por el mariscal Victor.
El Emperador decidió completar la destrucción de los cuerpos de Yorck y de Osten-Sacken. Para ello, comenzó por organizar su persecución, que no pudo ser emprendida con eficacia el día anterior porque las tropas estaban extenuadas. Dejó la DI-2/JG de voltigeurs de Curial (Decouz había sido herido) y la DI-8/VI de Ricard en Montmirail. Formó una columna mandada por Mortier y Ney compuesta por la DI-2/VG de Christiani (Michel estaba herido) y la DI-1/JG de voltigeurs, la DC-1/JG de Laferrière-Levêque y la DC-2/JG de Defrance; que fueron enviadas en dirección a Château-Thierry por la vía directa pasando por Fontenelle.
Napoleón, por su parte, se dirigió al oeste hacia Viels-Maisons con las tres divisiones de infantería restantes. Dejó algunos batallones allí y luego giró hacia el norte en dirección a Mont-Cel-Anger con el CEC-/VG de Nansouty (DC-1/VG de Colbert y la DC-2/VG de Guyot) con los granaderos de la DI-1/VG de Friant.
A las 13:00 horas Mortier fue el primero en probar la resistencia del dispositivo, se encontró con los RIs 1 y 2 de Prusia Oriental de la DML-/I avanzada de Katzler en las alturas entre Caquerets y Viffort, la posición fue atacada por 2 BILs de cazadores. Entonces Napoleón alcanzó Montfaucon y realizó una tentativa de envolver a las fuerzas prusianas por la derecha con la DC-2/VG de Guyot. Franqueó el río Dolloir, atacó los Caquerets y Katzler rápidamente se dio cuenta de la precariedad de su situación y ordenó a su línea que retrocediera sobre la línea principal.
Ante la llegada de los franceses, el general Yorck quería acelerar el cruce del río Marne. Sacken no quería abandonar botín y equipaje, o simplemente porque era imposible canalizar rápidamente tal masa de hombres y caballos por un solo puente, tomó la decisión de defenderse y presentar batalla.
Las tropas aliadas se posicionaron entonces detrás del barranco de la finca Trinité, transformado en reducto: la DM-7/I de Horn se situó sobre la carretera, la DM-1/I de Steinmetz (Pirch) a su izquierda frente a la Trinité, y la caballería de Jürgass reciben la orden de defender la meseta, para ganar tiempo y salvar hombres y equipaje. La caballería de Vasiltchikov se redistribuyó para cubrir el flanco izquierdo cerca de la granja Petit Ballois. En cuanto a Jürgass, se situó detrás de la infantería delante de Nesles.
Más adelante a lo largo de la carretera, los franceses encontraron a la DM-7/I prusiana de Horn impidiendo su avance. Los BGs de Silesia y Leib (Guardia) defendían el flanco derecho mientras que el RI Leib defendía el flanco izquierdo. La principal debilidad en esta línea estaba hacia su extremo este (izquierdo), donde había un puente que conducía a Petite-Noue, desde donde se podía envolver la posición.
Mientras las fuerzas francesas comenzaban a desplegarse en el frente, el Nansouty con la DC-1/VG de Colbert-Chabanais, DC-1/VG de Laferrière-Levêque) y la DC-2/JG de Defrance comenzó a maniobrar alrededor del flanco izquierdo prusiano. En ese momento, Napoleón envió 200 granaderos para apoderarse de la aldea de Petite-Noües. Mortier lanzó 6 BIs de la DI-2/VG al mando de Christiani en un ataque frontal.
Yorck ordenó a Wahlen-Jürgass que moviera 3.000 jinetes de la Reserva prusiana desde la carretera al flanco izquierdo para contrarrestar la amenaza de la caballería francesa. Formó a sus jinetes en dos filas, con el RD de Lituania (4) y RD de Prusia Oriental (4) y un RD ruso y detrás el resto. Nansouty situó al RH en vanguardia, los RDs de la Guardia en la primera línea y a los granaderos, coraceros y carabineros en la segunda línea. Cuando la primera línea prusiana cargó, se encontró con una descarga de fuego de los dragones.
El RH de Brandenburgo cargó contra el RH-10 francés que marchaba en vanguardia, teniendo que acogerse detrás de los dragones franceses; estos cargaron contra jinetes rusos de Vasiltchikov que acabaron abandonando el campo de batalla para replegarse hacia el puente que representaba su única vía de escape.
Los dragones franceses atacaron a sus homólogos prusianos, que se había quedado solos para hacerlos frente. Pronto hubo un gran tumulto de caballería cerca de la granja Petite-Baloy, se realizaron cargas y contracargas, y terminaron con la retirada de los prusianos que siguiendo el ejemplo ruso, se dirigieron también hacia el Marne.
Yorck ordenó a la DM-1/I y DM-7/I prusianas que se retiraran al norte para al amparo de la BRI rusa de Heidenreich situada en la granja La Trinit.
La retirada se lleva a cabo en relativo orden, El RI-15 Landwehr de Silesia se trasladó a la granja de, donde había un BIL jägger ruso, formando el flanco izquierdo, convirtiéndose en víctimas de los dragones franceses. Cubriendo el flanco derecho aliado, Heidenreich formó sus dos regimientos en cuadros y trató de retirarse. La retaguardia estaba el RI Leib (Guardia) que fue cortado por un RD francés, pero hizo una carga a la bayoneta y se liberó.
Napoleón decidió emplear la única caballería que tenía a mano los escuadrones de servicio (4, 400) de Vauchamps al mando de Belliard seguido del resto de la DI-2/JG de Guyot. Heidenreich formó sus dos regimientos en cuadros y trató de retirarse. Después de que sus tropas dispararon todas sus municiones, fueron invadidos los cuadros. Heidenreich y la mayor parte de su brigada fueron capturados, junto con tres cañones.
Una fuerza de caballería francesa al mando de Louis-Michel Letort de Lorville rodeó Nogentel. Cuando la columna prusiana en retirada emergió de la aldea, los jinetes de Letort cargaron contra los BGs de Silesia y Leib y el RI-5 de Silesia, infligiendo numerosas bajas y capturando dos cañones y un obús.
La caballería francesa infligió grandes pérdidas a los prusianos en retirada, pero luego los franceses se vieron detenidos por el mayor Stockhausen con 2 RIs de Prusia Oriental en el borde de los suburbios. La acción de retaguardia de Stockhausen permitió que la mayoría de las tropas aliadas se pusieran a salvo en la orilla norte del Marne.
Sin embargo, la infantería francesa tuvo que contentarse con tomar el Faubourg de Marne y no pudo perseguir al enemigo ni impedir la voladura del puente que separa el arrabal de la ciudad propiamente dicha, sobre todo porque la artillería prusiana, instalada en la margen derecha, la bombardea intensamente. Unos 400 que quedaron al otro lado del puente quedaron cortados y tuvieron que rendirse.
Por tercera vez en tres días, los franceses superaron a los aliados. Pero, aun así, no pudieron destruirlos. El mariscal MacDonald, que estaba en Meaux, a un día de marcha, no estaba en condiciones ni encontró la energía para completar en la margen derecha la victoria obtenida en la margen izquierda. En cuanto a la persecución, solo podía iniciarse tarde, una vez más, por el tiempo necesario para reparar el puente. Hecho esto, fue de nuevo Mortier quien fue enviado tras los pasos de Yorck y Sacken, en plena retirada por el camino de Soissons.
La destrucción del puente terminó efectivamente con la batalla. La artillería aliada en la orilla norte mantuvo a los franceses a distancia mientras el resto del ejército aliado continuaba su retirada. El fracaso de MacDonald en capturar el puente había reducido en gran medida el impacto de la serie de victorias de Napoleón, pero, aun así, los prusianos habían perdido unos de 1.250 hombres y los rusos alrededor de 1.500 hombres durante la batalla. Los franceses perdieron unos 500 hombres.
Después de la batalla, los aliados continuaron retirándose hacia el norte y llegaron a Oulchy-la-Ville al final del día. Los franceses tardaron 24 horas en conseguir un puente a través del Marne, y luego enviaron a Mortier para presionar a los aliados en retirada mientras avanzaban hacia el norte hacia Soissons. Napoleón condujo al resto de su ejército de campaña de regreso a Montmirail, listo para moverse hacia el sur para hacer frente a la amenaza de Schwarzenberg en el Sena. En el camino se le dio una oportunidad más de infligir una derrota a Blücher, cuando el Ejército de Silesia intentó bloquear su ruta hacia el sur, lo que condujo a la batalla de Vauchamps el 14 de febrero de 1814.
Batalla de Vauchamps (14 de febrero de 1814)
En la noche de su victoria en la batalla de Château-Thierry el 12 de febrero de 1814, Napoleón estaba bloqueado al sur del Marne por la destrucción de los puentes de la ciudad, vio escapar a los generales Yorck y Osten-Sacken. Al día siguiente, el cruce del río se haría demasiado tarde para que la persecución, confiada al mariscal Mortier con el CE-/VG, que casi sin realizar un disparo que llegarían a Châlons.
El 13 de febrero Napoleón partió de Château-Thierry, y enardecido por sus últimos triunfos sobre el Ejército de Silesia de Blücher, creía que era el momento de atacar al Ejército de Bohemia de Schawarzemberg, que estaba más al oeste.
Emperador recibió un informe de Víctor anunciando que el enemigo se fortalecía del lado de Montereau y amenazaba a París desde Fontainebleau, el Mariscal retrocedió sobre Nangis en la mañana del 13 y voló el puente en Nogente. Antes de enfrentarse al ejército de Schwarzenberg, tenía que ocuparse de los asuntos más urgentes y eliminar a Blücher de una vez por todas.
Mientras las fuerzas del Mortier perseguían a los cuerpos de Sacken y Yorck en retirada, Napoleón había dejado al CE-VI de Marmont, de tan solo 2.500 infantes y 1.800 jinetes, en Etoges, en el Viejo Camino de París, en vigilancia de las maniobras del resto del Ejército de Silesia.
En la noche del 13 de febrero, Blücher estaba en Champaubert donde pasó la noche; Marmont se instaló unos kilómetros al oeste, entre Fromentières y Janvilliers, listo para reaccionar ante cualquier iniciativa prusiana, ya fuera para girar al norte hacia Epernay o avanzar hacia el oeste en línea recta hacia París.
Pero la mañana del 14 de febrero, la vanguardia del Ejército de Silesia, 5.700 hombres la DM-11/II de Zeiten, comenzó a avanzar. Marmont se retiró de su posición con solamente dos horas de ventaja sobre los prusianos, dirigiéndose a Vauchamps, de donde recogió otros 5.000 soldados franceses que Napoleón dejado en el sector.
Marmont disponía de las siguientes fuerzas:
- DI-21/VI de Lagrange: RI-1 de Marina (2), RI-2 de Marina (4), RI-3 de la Marina (3), RI-4 de la Marina (3), RI-23 (1), RI-27 (1), RI-1 (1), RI-15 (1), RI-16 (1), RI-62 (2), RI-70 (2), y RI 121 (1).
- DI-8/VI de Ricard con 5 BILs (RILs 2, 4, 6, 9 y 16) y 9 BIs (RIs 22, 40, 50, 69, 136, 138, 142, 144 y 145).
- Artillería del CE-VI: 2 Bías de posición (8×12) y 3 Bías a pie (13×6).
- DI-7/VII de Leval: RIL-10 (2), RI-3 (1), RI-5 (1), RI-130 (2), RIL-17 (2), RI-101 (1), RI-105 (2).
Zieten llegó a Vauchamps, Situó el RI-10 de la Reserva (2) ocupando la ciudad y desplegó tiradores al frente. Detrás del pueblo se encuentra el RI-1 de Silesia (3). A su derecha un RH del RH-1 de Silesia que llegaba hasta el bosque de Essarts, que se extendía al norte de Vauchamps. El RC-7 Landwehr ocupó el extremo derecho del dispositivo prusiano. En cuanto a la izquierda, al sur de Vauchamps desplegaron 2 Cías del BIL Schützen de Silesia y los 3 EHs restantes de RH-1 de Silesia.
Bonaparte ordenó a Marmont que atacase con sus 9.300 franceses a la DM-11/II de Zieten, prometiéndole mandar tropas contra el grueso del Ejército de Blücher y el mismo avanzaría en su apoyo.
Marmont asentó su artillería, quizás 24 cañones, en batería y golpeó la línea prusiana. A la llegada DI-7/VII de Leval sobre las 10:00 horas, se dio la orden de ataque. Ricard a la izquierda, Lagrange a la derecha y Leval a retaguardia, estaban más atrás. Ricard se acercó con una BRI por el bosque de Beaumont (al sudoeste del pueblo), mientras otra BRI avanzaba de frente.
Los franceses pronto hicieron retroceder a las tropas prusianas más avanzadas y, en respuesta, el principal ejército aliado comenzó a avanzar desde su posición en Fromentieres, al este de Vauchamps. El CE-II prusiano de Kleist estaba a la derecha aliada (norte de la carretera) y el CE-X ruso de Kapsevich a la izquierda (sur).
Las tropas francesas entraron en el pueblo, pero con la llegada de refuerzos aliados, los franceses fueron rechazados. Enardecidos por su éxito, iniciaron la explotación; al intentar perseguir a los asaltantes a los que acababan de repeler, fueron exterminados o apresados cuando Napoleón ordenó cargar a sus 4 escuadrones de Servicio al mando de Lion.
La infantería y la caballería francesa tomaron definitivamente Vauchamps, los prusianos se retiraron como pudieron en la llanura detrás del pueblo.
A la izquierda de los franceses, el general Grouchy reunió la caballería (DCC-2 de Saint-Germain, DCL-1 de Dourmec) cerca de Hautefeuille. La DC-2/VG de Guyot seguiría detrás. Grouchy recibió la orden de esperar el contraataque de la infantería en Vauchamps antes de envolver a la derecha aliada a través de l’Échelle y Sarrechamps.
Así, la infantería de Zieten, empujada hacia atrás desde el pueblo de Vauchamps, trató de unirse al grueso del ejército prusiano en dirección a Fromentières. Sin embargo, la caballería de Grouchy cargó contra ellos antes de que los batallones pudieran formar cuadros. De los 6 batallones que formaban la vanguardia, solo 532 hombres lograron unirse a Blücher. Se reorganizarían en un único batallón en La Boularderie sobre las 14:00 horas.
Blücher estaba a las 11:00 horas en Fromentières y recibió los informes sobre el movimiento de la caballería francesa. Desplegó la infantería rusa del CE-X Kaptsevich a la izquierda, al sur de la calzada. Luego, Kleist, habiendo llegado a Janvilliers con la DM-10/II de Pirch y la DM-12/II de Augusto de Prusia; la DM-10/II se situó entre la aldea y la carretera y la DM-12/II permaneció en la segunda línea. Como Janvilliers ya estaba en manos de los elementos avanzados de la caballería francesa que amenazaban su flanco, Pirch organizó rápidamente un ataque con su DM-10/II y retomó la ciudad sin muchas dificultades, y desplegó 2 Bías rusas asignadas al CE-II.
La caballería francesa en su ala derecha representaba una amenaza inminente. Por lo tanto, ordenó a la única caballería disponible, la BRC-/II de Hake (RCC de Silesia y RC ulano de Silesia), que cambiara su posición de izquierda a extrema derecha para cubrir el movimiento de Grouchy. El BI-III/7 de la Reserva de la DM-10/II se refugió en la granja de Sarrechamps. Su sacrificio contribuyó a frenar a los franceses. De una fuerza de 7 oficiales y 322 hombres, 6 oficiales y 108 hombres fueron muertos, la mayoría de los demás fueron heridos y capturados.
Sobre las 14:00 horas, Blücher se dio cuenta de que su posición estaba en gran peligro y ordenó la retirada. Para cubrir la retirada mandó desplegar su artillería, Napoleón respondió utilizando la artillería de la Guardia mandada por Drouot. Los aliados fueron superados y su docena de piezas poco pudieron hacer contra las cincuenta que golpearon su retirada durante casi dos horas.
Blücher tenía que actuar con rapidez para alcanzar la seguridad que proporcionaba el desfiladero situado a la altura del bosque que separa Champaubert de Étoges, el bosque de la Grande Laye. Envió un mensajero a retaguardia para advertir al general Udom II que ocupara ese paso. Este último reorganizó a los 1.800 hombres que habían sobrevivido del CE-IX, que había sido diezmado en la batalla de Champaubert unos días antes. Los hombres de Udom estaban exhaustos después de la larga retirada y la lucha y, al ver que había caído la noche, pensaron que estaban a salvo. Sin embargo, los coraceros de Doumerc, formados sin ser vistos en la noche, sorprendieron a estos hombres y una sola carga fue suficiente para hacer huir a los hombres aterrorizados.
Las DIs de Marmont y la caballería de Laferrière-Levesque persiguieron a los aliados en retirada, habían perdido tiempo para reorganizarse después de la captura de Vauchamps y la artillería solo podía seguir a la infantería por la carretera. Sin embargo, el movimiento desbordante de la caballería francesa a su derecha preocupa a Kleist, quien también advirtió que Kaptsevich se está quedando atrás y que se estaba creando una brecha entre los dos CEs.
La caballería de Grouchy hostigó sus flancos derechos, causando numerosas bajas, y luego logró llegar a la carretera al este de los aliados, bloqueando su ruta de escape a Etoges. Todo lo que los franceses necesitaban para completar su éxito era colocar su artillería a caballo en el lugar, pero las condiciones fangosas les impidieron lograrlo, y después de una dura lucha, Blücher pudo pasar la barricada de Grouchy antes de que la infantería francesa pudiera llegar.
Mientras Blücher continuaba la retirada hacia Bergères-les-Vertus (estaría allí alrededor de las 22:00 horas), cruzó el bosque de Vertus y tomó posiciones en Étoges con la DI-8/X del príncipe Urusov, que había quedado allí en reserva. El general ruso Udom, con 1.800 hombres y 15 cañones, recibió instrucciones de cubrir la posición, ocupando el parque de Étoges.
Los coraceros de Doumerc, formados sin ser vistos en la noche, sorprendieron a los hombres de Udom, que estaban exhaustos después de la larga retirada y la lucha y, al ver que había caído la noche, pensaron que estaban a salvo. Una sola carga fue suficiente para hacer huir a los hombres aterrorizados.
El general Urusov II, comandante de la DI-8/X rusa, debía permanecer en Étoges. Marmont con las tropas del CE-VI que pudo reunir en poco tiempo, ordenó que se montase un ataque nocturno sobre Etoges.
Los atacantes conocían bien el terreno, ya que habían ocupado esa posición en los días anteriores. Así, directamente por la calzada, el propio mariscal dirigió el ataque. Es el RI-1 de Marina sería la punta de lanza. Por esta hazaña de armas, el coronel Maury sería nombrado barón el 26 de febrero. Algunos otros batallones utilizaron la carretera de Fèrebrianges y atacarán a los rusos por la retaguardia. Las instrucciones eran marchar en silencio, no disparar y no responder al fuego enemigo. El ataque debía hacerse con armas blancas.
Este ataque nocturno, bien dirigido y vigoroso, causó pérdidas mínimas a los atacantes. Marmont informó al Emperador de la captura de 1.200 prisioneros rusos, incluido el propio príncipe, herido de bayoneta, así como un coronel y dos mayores. Cenaría esa misma noche con el príncipe Urusov.
Durante la jornada los aliados sufrieron unas 7.000 bajas, reconocerían unos 6.000 de los cuales 2.000 rusos y 4.000 prusianos, incluidos solamente 200 jinetes además de perder 15 cañones (7 prusianos y 8 rusos), carros de suministros y gran parte de la caballería. Los franceses tuvieron unas 600 bajas.
Esta derrota fue humillante para Blücher, que durante los últimos 5 días había perdido en combate unos 20.000 hombres y 62 cañones, para terminar retirando todo su ejército, mientras que sus adversarios habían defendido París perdiendo unos 3.500 soldados. Para Napoleón había supuesto el colofón a una de las campañas más espectaculares de su vida, ganándose incluso la admiración de sus enemigos, que no volverían a infravalorarle.
Pero lo cierto es que Blücher podría rehacerse de sus pérdidas, y Bonaparte no.
Blücher, cruzó el río Marne al día siguiente y continuó su ruta los días siguientes hasta más allá de Châlons, donde pronto se unieron demás restos de su ejército. Fue privado durante algún tiempo de cualquier capacidad operativa.