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Lucha por Papelotte, Smohain y La Haye
Primer asalto francés a Papelotte y la Haye (14:00 horas a 15:00 horas)
Al final del flanco izquierdo de Wellington había cuatro puntos fuertes, de este a oeste, el castillo de Frischermont, el pueblo de Smohain y las dos granjas de La Haye (no confundir con La Haye-Sainte en el centro del campo) y Papelotte. El río Smohain atravesaba el pueblo y había dos zonas principales de bosques: alrededor de Papelotte y de Frischermont. Al norte de esta área, el terreno se elevaba hasta la cresta, que corría a lo largo de toda la posición de Wellington, ya lo largo de esta cresta había un camino. Las vías cruzaban esta carretera y conducían a Papelotte, La Haye y Smohain. Hacia el sur de la posición, el suelo se elevaba, pero con menos pendiente que en el lado norte, de modo que todos los puntos fuertes, excepto Frischermont, estaban en un valle, por donde discurría otro camino. Frischermont estaba más en las laderas del sur. Fue en esta zona donde se libró una de las acciones más feroces pero menos conocidas de la batalla de Waterloo.
A las 10:00 horas del 18 de junio, los dos bandos habían desplegado. A lo largo de la carretera en la cresta se colocaron, de izquierda a derecha de Wellington: la BRC-VI de Vivian (RH-1 KGL, RH-10 y RH-18) con la Bía a caballo de Gardiner, la BRC-IV de Vandeleur (RDL-11, RDL-12 y RDL-16), la BRI-V/5/R hannoveriana de Vincke y la BRI-IV/6/R hannoveriana de Best y la Bía a pie hannoveriana de Rettburg. Entre Best y Vincke también estaba la Bía a caballo belga-holandesa de Byleveld, adscrita a la BRI-II/2/I del príncipe de Sajonia-Weimar, que ocupaba Papelotte, La Haye y la carretera que bordea el valle. Mientras tanto, un EH del RH-10 de Vivian estaba estacionado en la aldea de Smohain, que acababa de relevar a un EH del RH-18 y un pequeño puesto de avanzada del RH-12 KGL.
En el lado sur del valle, la DI-4/I de Durutte desplegó frente a Papelotte y La Haye, mientras que la DCL-1/I de Jacquinot y su Bía a caballo ocuparon Frischermont y se enfrentaron al RH-10 en Smohain.
Sajonia-Weimar ordenó fortificar las dos granjas abriendo huecos en las paredes. 2 BIs del RI-2 de Nassau formaron en línea, detrás de la carretera del valle al oeste de Papelotte, ocupando las filas de setos en el frente con escaramuzadores. Una compañía flanqueadora estaba en Papelotte. El RI-28 de Orange-Nassau (2) ocupó La Haye y parte de Smohain.
Alrededor del mediodía. El capitán Taylor del RH-10 estaba sentado en la casa de Smohain cuando de repente fue irrumpido por un soldado que dijo que 3 escuadrones franceses se dirigían hacia allí. Se trataba de 3 ECs de cazadores del RC-3 de Jacquinot. También había un movimiento general en todo el camino por la ladera opuesta, las tropas y los cañones ocupaban sus posiciones.
La Gran Batería de Napoleón se estaba formando, los cañones de 12 libras de la Guardia se unían a las baterías del CE-I y del CE-II listas para bombardear la cresta a lo largo de la cual estaban desplegados los hombres de Picton.
El RC-3 de cazadores franceses, hizo retroceder a las patrullas del EH de Taylor que se replegaron sobre Smohain, y posteriormente se reincorporaron a la BRC-VI de Vivian, dejando a los de Nassau conteniendo a los franceses.
La DI-4/I de Durutte formó en 8 columnas de batallón, 2 por cada RIs 8, 29, 85 y 95, y avanzaron. Los voltigeurs hicieron retroceder a los escaramuzadores de Nassau y luego, cuando las otras columnas de Erlon fueron recibidas por descargas de los hombres de Picton, las columnas de Durutte hicieron retroceder a los 2 BIs de del RI-2 de Nassau; que bordeaban el camino del valle y comenzaron a amenazar la segunda línea de defensa, la BRI-V/5/R hannoveriana de Vincke y la BRI-IV/6/R hannoveriana de Best. El fuego de las baterías de Braun y Beleveld atravesaron las columnas francesas, que subían cuesta arriba.
Más franceses llegaban a las dos granjas de Papelotte y La Haye y las cosas no iban bien para los aliados allí. En Papelotte, los franceses debieron sufrir grandes pérdidas cuando llegaron a los altos muros, pero una vez que lograron forzar la entrada a la granja, su ventaja numérica significaba que el lugar caería pronto.
Los franceses tenían dos de los cuatro bastiones (Frischermont y Papelotte), estaban firmemente establecidos en parte del tercero (Smohain) y todavía estaban en condiciones de tomar el cuarto (La Haye).
Durante la carga británica de Uxbridge, fuerzas de Erlon sufrieron fuertes pérdidas y fueron desorganizados, dando un respiro al ataque de las granjas de Papelotte y La Haye.
Pasadas las 15:00 horas, los franceses se reagruparon y reanudaron sus ataques a la finca. Los nassaueres contraatacaron y obligaron al enemigo a salir de la carretera hundida a punta de bayoneta. La batería francesa disparó canister y arrojó a los nassaueres hacia atrás. Los prusianos llegaron más tarde y pensaron que la finca estaba en manos francesas. Confundieron los uniformes de los nassaueres con los franceses.
Primer ataque prusiano
Ante la amenaza de los prusianos, Napoleón había enviado la DCL-3/III de Domon y la DCL-5/I/R de Subervie para proteger el flanco derecho de su ejército y observar cualquier movimiento prusiano. También se destacó el CE-VI de Lobau para apoyar a la caballería y se tomaron varios cañones de la derecha de la Gran Batería.
Finalmente, el CE-IV prusiano de Bülow llegó desde Wavre a las 16:30 y atacó. Para unirse con el flanco izquierdo de Wellington y proteger su propio flanco derecho del ataque francés, Bülow envió tres batallones de la BRI de Losthin a Frischermont, desde donde la caballería de Jacquinot ya se había retirado. El BI-II/8 y el BI-III/3 Landwehr de Silesia encabezaron el avance, con el BI-I/18, siguiéndolos en reserva.
Habiendo pasado Frischermont y atravesado Smohain con considerable precaución alrededor de las 17:00 horas, los batallones prusianos marchan paralelos al río Smohain, pero los hombres de Durutte los cargaron y se retiraron de regreso al pueblo de Smohain. El teniente Ingilby de la batería de Gardiner vio esta escaramuza y se sintió frustrado porque los franceses estaban fuera del alcance efectivo de sus cañones de 6 libras. Eventualmente, la posición se estabilizó en este sector del campo de batalla y el clima comenzó a mejorar.
Segundo ataque prusiano
Esta pausa en la lucha terminó alrededor de las 18:15 horas. En un ataque feroz y desesperado, los franceses acababan de invadir La Haye-Sainte en el centro del campo de batalla y las unidades de infantería, caballería y artillería estaban atacando a lo largo de la línea. Los hombres de Durutte volvieron a avanzar, precedidos por la habitual fila densa de voltigeurs. Nuevamente, tanto la artillería francesa como la aliada abrieron con un disparo de cañón. Las baterías de Byeveld y Rettburg, situadas en un terreno elevado con un excelente campo de tiro.
Nuevamente, los franceses irrumpieron en la granja Papelotte y tomaron el lugar y probablemente trataron de la misma manera con la granja La Haye. Los nassaueres, exhaustos, diezmados y superados en número, se retiraron a la segunda línea de defensa de las brigadas hannoverianas Landwehr de Best y Vincke. Se ordenó a la BRC-VI británica de Vivian y BRC-IV británica del Vandeleur, junto con la batería de Gardiner, que se dirigieran hacia el oeste para apoyar el centro en peligro de Wellington y era poco probable que BRI-V/5/R hannoveriana de Vincke pudiera proporcionar mucha ayuda. De hecho, fue llamada a Mount Saint-Jean para proporcionar una reserva.
Además, debido a las bajas en la división de Picton, la brigada de Best se movería ligeramente hacia el oeste para ayudar a llenar los huecos en la línea allí. Los prusianos en Smohain estaban comprometidos y, por lo tanto, no podían prestar mucho apoyo. El CE-I prusiano de Zieten todavía estaba demasiado lejos del campo de batalla para ayudar.
La posición de los nassaueres era desesperada, habían podido retomar Papelotte y La Haye, aunque debido a sus escasos efectivos, no pudieron guarnecerlos lo suficiente como para asegurarse de que no volvieran a caer.
Tercer ataque prusiano
Hubo otra pausa espantosa cuando los dos bandos se reagruparon y se prepararon para el golpe final. El CE-I prusiano de Zieten ya había comenzado a alejarse de la carretera que conducía a la posición de Wellington, cuando el general Muffling, oficial de enlace prusiano con el ejército anglo-holandés, llegó y convenció a Zieten de que los anglo-holandeses tenían que ser reforzados directa e inmediatamente o serían derrotados. Las brigadas prusianas de la vanguardia marcharon de regreso para ayudarlos.
Sin embargo, iba a haber un último ataque francés. Toda la línea francesa avanzó en apoyo del ataque de la Guardia Imperial en el centro del campo de batalla, animada por el anuncio de Napoleón de que llegaban los franceses de Grouchy, no los prusianos de Zieten. Los hombres de Durutte se abalanzaron de nuevo y abrieron fuego mientras avanzaban por las vías y se acercaban a los batallones de Nassau. Mientras tanto, hacia el norte, llegó la BRI-I/I de Zieten al mando de Steinmetz y se desvió de la carretera de la cresta para iniciar el descenso hacia las granjas Papelotte y La Haye, mientras los franceses comenzaban a derribar las puertas de las dos granjas y asaltar los edificios, capturando totalmente a Papelotte.
Entonces los batallones de Zieten se desplegaron: el BI-III/12, seguido por las Cías 1 y 3 de fusileros de Silesia, se abalanzaron sobre Papelotte, mientras que el BI-I/24 y el BI-II/24 avanzaron hacia La Haye y BI-III/1 Landwehr de Westfalia les siguió en apoyo. Al principio, los franceses, recordando el anuncio de Napoleón, pensaron que Grouchy había llegado, pero al ser recibidos por andanadas de plomo, pronto retrocedieron. Los prusianos entraron en La Haye: “desgraciadamente, confundieron a los nassaueres del príncipe de Sajonia-Weimar, cuyo uniforme sigue siendo muy francés (ya que una vez sirvieron en esa organización francesa, la Confederación del Rin), hicieron un fuego terrible sobre ellos”. Los nassaueres fueron expulsados de su posición. Solo se dieron cuenta después de que se infligieron muchas bajas en ambos lados.
Sin embargo, no había tiempo para detenerse. La caballería prusiana unida a la guardia avanzada de Zieten: el RH-1 de Silesia, el RC-3 ulanos de Brandeburgo, el RD-5 de Brandeburgo y el RC-2 Landwehr de Kurmark, de las BRC-II/I de Lutzow y BRC-I/I Treskow, formaron a lo largo de la cresta de la cresta cumpliendo el papel de apoyo que Vivian y Vandeleur habían tenido anteriormente. Además, la Bía-7 a caballo prusiana relevó a la Bía de Rettburg que había agotado sus municiones; mientras que el resto de la artillería del CE-I formó en las laderas de la cresta al norte de los puestos de avanzada y lanzó fuego de flanco sobre el CE-VI de Lobau y el CE-I de Erlon. El destacamento de caballería del CE-IV y mientras tanto llegó y estaba listo para proteger el flanco izquierdo de la segunda fase del ataque de Steinmetz. La propia infantería de Steinmetz ya se había consolidado alrededor de las granjas, de modo que los cuatro puntos fuertes de este sector estaban ahora en manos aliadas. Mientras tanto, el príncipe de Sajonia-Weimar y los nassaueres ocuparon una posición entre Steinmetz y la caballería del CE-I.
A estas alturas, la Guardia Imperial francesa había sido rechazada y el impacto de la llegada de Zieten en lugar de Grouchy completó la derrota del ejército francés. Totalmente desmoralizados, los franceses fueron atacados por todos lados, el avance general de Wellington, otro ataque prusiano en Plancenoit y, lo que es más importante, la continuación del ataque de Steinmetz.
Cuando la DI-4/I de Durutte se dio a la fuga, con su comandante (un superviviente tanto de la retirada de Moscú como de Leipzig) gravemente herido, el mariscal Ney reunió a dos de sus batallones y los condujo hacia delante; solo para ser arrastrados hacia atrás en una ola de huida de tropas desmoralizadas. La caballería de Zieten cargó en su persecución y mató a muchos franceses, antes de quedar atrapada en el mar arremolinado de un ejército derrotado.
Cuando los últimos soldados abandonaron el sector de batalla, una calma mortal cayó sobre la escena. Smohain tenía la mitad de sus casas destruidas, mientras que La Haye y Papelotte también sufrieron graves daños. Los saqueadores, principalmente prusianos, ya estaban trabajando y los heridos tendrían que esperar mucho tiempo hasta recibir atención médica. En total, Zieten había sufrido alrededor de 320 bajas, las pérdidas de Durutte debieron ser enormes tanto en el campo de batalla como en la derrota, mientras que el príncipe Bernardo de Sajonia-Weimar, escribiendo el 19 de junio a su padre, señaló que solo 1.200 de sus 4.000 hombres estaban todavía listo para la acción.
Ataque prusiano a Plancenoit
Primer asalto prusiano a Plancenoit (de 16:00 a 18:00 horas 18 junio)
El CE-IV prusiano de Bülow había abandonado Chapelle Saint-Lambert más tarde de lo previsto, debido a atascos en los caminos, el mal estado del terreno y la descoordinación entre sus unidades: la BRI-XIII Hacke, la DI-XIV de Ryssel, la DI-XV de Losthin, y la DI-XVI de Hiller; la caballería del príncipe Guillermo de Prusia, formada por un RC de ulanos, 3 RHs y 7 RCs Landwehr, y 11 baterías; en total unos 26.000 infantes y 5.400 jinetes.
Debido a la proximidad de Grouchy, se consideró demasiado peligroso marchar hacia el oeste por el lado sur del río Dyle, por lo que se ordenó a todo el CE-IV que pasara el estrecho puente y la carretera a través de Wavre, que era un gran cuello de botella. La situación no mejoró cuando se desató un incendio en el pueblo, pero solo se transmitió a un par de casas y las tropas y artillería del CE-IV de Bülow pronto pudieron continuar su marcha.
Habiendo pasado Wavre, las tropas continuaron por el camino hacia Chapelle Saint-Lambert y los elementos principales del cuerpo de Bülow comenzaron a llegar allí poco después de las 10:00 horas. El CE-II de Pirch debía seguir a Bülow, pero también se vio obligado a detenerse por el fuego en Wavre y se habían ido a las 16:00 horas antes de que todo su CE-II pasara por Wavre.
La BRI-XV, en vanguardia del CE-IV de Bülow, permaneció en Chapelle Saint-Lambert desde las 10:00 horas, esperando pacientemente la llegada de las otras BRIs antes de acercarse más al campo de batalla; pero eran las 14:00 horas, cuando finalmente llegó la BRI-XVI y otra hora antes de que pudiera subir la BRI-XIV que formaba la retaguardia. Bülow inicialmente fue cauteloso porque no había sonidos de batalla en su frente.
Sabiendo que las otras BRIs se acercaban, Bülow, actuando según los informes favorables de sus exploradores, decidió marchar con la BRI-XV al bosque de París a las 14:00 horas; encontraron el valle de Lasne pantanoso por las fuertes lluvias, pero sin vigilancia.
Finalmente, cruzaron el Lasne, llegando al bosque de París poco después de las 15:00 horas, cuando se colocaron piquetes en cada salida para mantener el secreto de su llegada. A las 16:00 horas, la BRI-XVI y la caballería del cuerpo también se habían unido y media hora más tarde también llegaron a la BRI-XIII, que había descansado en Chapelle Saint-Lambert durante unas tres horas. La artillería de reserva y la BRI-XIV llegaron al bosque de París a las 17:00 horas con la BRI-V del CE-II marchando de cerca.
Blücher ordenó a Bülow que lanzara un ataque inmediato con sus dos brigadas y su caballería sin esperar apoyo. Bülow protestó, pero Blücher insistió en que debían hacer algo para aliviar la presión sobre el ejército de Wellington.
Mientras las tropas de Bülow avanzaban, haciendo retroceder a los piquetes de caballería francesa, la BRI-XIII y su artillería finalmente llegaron para fortalecer el ataque.
El CE-VI francés de Lobau está desplegado en ángulo recto respecto al ala derecha del CE-I de Erlon, integrada por la DI-4/I de Durutte.
Lobau se vio sorprendido y lanzó un rápido ataque contra los prusianos, que retrocedieron entre los árboles; sin embargo, Bülow envió parte de la BRI-XV a su derecha para asegurar Frischermont y el bosque vecino, para evitar cualquier ataque por el flanco de las tropas de Durutte, amenazando con envolver a los franceses, y estos se replegaron al norte de Plancenoit.
Desde ese momento, Napoleón sentiría inquietud por su flanco derecho, anhelando la llegada de los 30.000 hombres de Grouchy; este había recibido su orden de acudir al sur de Waterloo a las 15:30 horas.
A las 17:00 horas, las vanguardias del CE-II prusiano de Pirch-I adelantaron a las tropas de Bülow por su flanco izquierdo, al sureste del bosque de París. Esta unidad estaba formada por la BRI-V de Tippelskirch, la BRI-VI de Krafft, la BRI-VII de Brause y la BRI-VIII de Böse, la caballería de Wahlen Jürgass, formada por 1 RC de ulanos, 2 RDs, 3 RHs y 2 RCs Landwehr, y diez baterías de artillería, en total unos 27.000 infantes y unos 5.500 jinetes.
De momento, los prusianos congregaron ante Plancenoit unos 20.000 soldados. La BRI-V de Tippelskirch estaba tomando posiciones al sureste de la villa, y la BRI-XIII de Hacke al norte. Lentamente, se acercaban desde Chapelle Saint-Lambert una brigada de caballería y las BRI-XIV de Ryssel y la BRI-XVI de Hiller.
Además, el mariscal Blücher se aproximaba desde Wavre con el CE-I prusiano de Zieten, dejando al CE-III de Thielmann para contener a los franceses de Grouchy, quienes ya no pueden impedir que el grueso del ejército prusiano de Blücher llegase al sur de Waterloo; sin embargo, Napoleón no tendría noticias de esta grave situación.
El primer ataque de Bülow a Plancenoit se realizó con 6 batallones de la BRI-XVI de Hiller formados en tres columnas de asalto. La columna de la derecha estaba formada por el RI-15 (2); la columna centro el RI-1 Landwehr de Silesia (2), y la columna izquierda el RI-2 Landwehr de Silesia (2). Los atacantes fueron apoyados con parte de la BRI-XIV de Ryssel (RI-11 [3] y RI-1 Landwehr de Pomerania [3]).
Los soldados del RI-15 (2) entraron en el pueblo y luego en los altos muros del cementerio y la iglesia. Los prusianos se encontraron bajo el fuego de los tiradores franceses estacionados en las casas. Un intercambio mortal de disparos estalló desde una distancia de no más de 20 pasos.
Los franceses habían llevado cañones y obuses a las calles, donde las descargas de canister a corta distancia barrían a los atacantes. El asalto prusiano inicialmente tuvo éxito, haciendo retroceder a los defensores franceses, hasta el espacio abierto alrededor de la iglesia, que se encontraba en una pequeña colina y estaba rodeada por un muro defensivo. Allí encontraron una furiosa resistencia y se detuvo el avance. La sangrienta lucha cuerpo a cuerpo se extendió por todo el pueblo sin que ninguno de los bandos realmente ganara la partida, aunque los prusianos capturaron 2 cañones y 1 obús y varios cientos de prisioneros.
Hacia las 17:30 horas, los 15.000 franceses de Lobau, siguieron manteniendo sus posiciones a costa de muchas bajas; pero progresivamente se incorporaron más de sus regimientos al frente; media hora después, los prusianos volvieron a atacar con la BRI-V/II de Tippelskirch apoyados la BRI-XVI de Hiller y la BRI-XIV, consiguiendo ocupar la parte oriental de Plancenoit.
El general Bülow envió 2 BILs para unirse a Wellington y proteger su flanco expuesto. Los fusileros del RI-18 y del RI-3 Landwehr de Silesia marcharon hacia Frischermont, Smohain y Papelotte. La infantería prusiana se encontró con los amigos nassaueres que abrieron al confundirlos con franceses Los nassauer respondieron de la misma manera y la fusilería continuó durante 10 minutos antes de que ambos bandos se dieran cuenta de su error. Peter Hofschroer escribe: “Esta unión simbólica de soldado alemán con soldado alemán marcó el principio del fin de la batalla de Napoleón”.
Más al norte, elementos del CE-I prusiano de Zieten se unieron a las tropas de Wellington en el flanco izquierdo. El comandante Gillhausen de Landwehr prusiano escribe: «Allí nos unimos a un batallón escocés y otro de Hannover«. Harkot continúa: «Los vacilantes ingleses confundieron el destacamento prusiano con el enemigo y dispararon. Como los prusianos no respondieron, pronto se dieron cuenta de su error«. Los hombres se reconocieron y se dieron la mano.
Contraataques de la Guardia Imperial en Plancenoit (de 18:00 a 19:00 horas 18 junio)
Poco antes de las 18:00 horas, Napoleón envió a reforzar su ala derecha a sus tropas de la Joven Guardia, unos 4.000 soldados en 8 batallones al mando del general Duhesme, que tomaron al asalto la parte occidental del pueblo, expulsando a los batallones de la BRI-V/II prusiana de Tippelskirch. Los franceses emplazaron baterías al norte y al sur, mientras los prusianos se reagruparon.
La BRI-XIII y la BRI-V prusianas, unos 15.000 soldados, atacaron Plancenoit desde los flancos y concentrando su fuego artillero empujaron al oeste a los batallones del CE-VI de Lobau. Desalojaron a la Joven Guardia de la villa, asaltándola en una serie de sangrientos combates callejeros cuerpo a cuerpo; el resto de las tropas francesas del sector comenzaba a retroceder lentamente. Duhesme recibió un disparo en la cabeza mientras instaba a sus guardias y no pudo continuar al mando. Solo permaneció en su caballo con la ayuda de varios de sus oficiales. Moriría a causa de sus heridas en Genappe dos días después.
En este momento, con Plancenoit casi en su totalidad en manos prusianas y con el CE-II prusiano Pirch comenzaba a llegar en apoyo, la posición de Napoleón parecía muy precaria.
Napoleón se percató de que si los prusianos se afianzan en Plancenoit, la retaguardia de su flanco derecho quedará expuesta a posteriores ataques lanzados desde allí.
Para recuperar la villa, Bonaparte manda inmediatamente el BG-II/2 con 2 Cías del BG-I/2 de su Vieja Guardia bajo el general Pelet, las mejores tropas a su disposición, y el BI-I/2 de cazadores de la Vieja Guardia al mando del general Morand, en total unos 1.500 efectivos. El general de brigada Roguet advirtió a sus hombres antes de luchar que se fusilaría a cualquier francés que hiciese prisioneros.
Hacia las 18:10 horas, la Vieja Guardia, con la compañía de cazadores del capitán Peschot al frente, asaltó Plancenoit con un arrojo fanático, marchando en formaciones cerradas con la bayoneta calada, al son de tambores y profiriendo ardorosos gritos de: “Viva el Emperador…!”, siendo apoyados por la Joven Guardia.
Los prusianos intentaron resistir en la iglesia, situada sobre un promontorio, y en el cementerio ajardinado, pero pronto fueron desalojados por los franceses, que entraron por las calles occidentales, trabando combate cuerpo a cuerpo contra fuerzas abrumadoramente superiores, con la bayoneta y sin realizar disparos; incluso el mayor francés Stubert participaba en la lucha empleando su largo bastón musical como maza.
Los franceses desalojaron por la parte oriental a 14 batallones prusianos. Los lanceros de la DCL-5/I/R de Subervie persiguieron a los fugitivos; en 20 minutos de lucha, los prusianos sufrieron unas 3.000 bajas y abandonaron todas sus baterías de vanguardia.
Esta espectacular acción elevó la moral de todo el flanco derecho francés; las dos divisiones del CE-VI francés de Lobau y las tropas de la Joven Guardia contraatacaron, haciendo retroceder a los prusianos y reocupando Plancenoit totalmente.
Una vez terminados los combates, los franceses consolidaron sus posiciones. Formaron una línea desde el suroeste de la granja de Papelotte hasta Plancenoit, mientras Pirch y Bülow reorganizan a las unidades de sus CE-II y CE-IV y desplegaron a las tres brigadas que llegaban, llegando a concentrar unos 30.000 soldados en la zona.
Bonaparte confiaba en poder contener la amenaza prusiana solo con el CE-VI de Lobau y la Joven Guardia, ordenando a las 19:00 horas que los batallones de la Vieja Guardia volviesen junto a él; orden que no se llegaría a cumplir. Por entonces esperaba que el ataque definitivo del mariscal Ney destruyese el centro aliado antes de que se reagrupasen los prusianos.
Wellington, que había perdido ante los franceses la posición fuerte de la Haye-Sainte a las 18:30 horas, junto a miles de soldados y oficiales anglo-holandesas en su despliegue central por heridas, muerte o deserción, se desanimó más aún con el estancamiento de los prusianos en Plancenoit, pues de ellos dependía la victoria.
Tercer y Último Asalto Prusiano a Plancenoit (de 20:15 a 21:00 horas 18 junio)
Entre las 19:30 y las 20:00 horas, la vanguardia del CE-I prusiano del general Zieten, unos 15.000 soldados, desplegó cerca de la granja de Papelotte, ante la DI-4/I de Durette, en el ala derecha del CE-I francés de Erlon, y el CE-VI francés de Lobau, destacado entre el anterior y el norte de Plancenoit.
El mariscal Blücher cabalgó hacia este sector y ordenó a los generales Pirch jefe del CE-II y Bülow jefe CE-IV, ya con unos 30.000 prusianos desplegados al este de Plancenoit, retomar la ofensiva contra la villa para flanquear al CE-I y obligarle a retroceder, liberando a los anglo-holandeses de su presión a lo largo del camino de Ohain.
El sector de Plancenoit estaba defendido por el CE-VI de Lobau, la división de la Joven Guardia Imperial al mando del general Duhesme, y el BG-II/2 de la Vieja Guardia, sumando en total unos 20.000 franceses.
Hacia las 20:15 horas, los prusianos de Pirch y Bülow realizaron cargas masivas a la bayoneta calada, iniciándose una serie de sangrientos combates cuerpo a cuerpo por las calles de la villa. En los enfrentamientos Duhesme fue herido de muerte, así como el general de brigada francés Barrois, y el propio Lobau es capturado.
Al cabo de media hora, los asaltantes comenzaron a flanquear en Plancenoit por el sur, obligando a la Joven Guardia a retroceder para no quedar cercada, maniobra que sus soldados ejecutaron manteniendo en todo momento su disciplina y formaciones; para cuando abandonaban la parte occidental de la villa habían sufrido no menos de 3.500 bajas.
Los granaderos del BG de la Vieja Guardia fueron los últimos en replegarse de Plancenoit, disparando continuamente desde el interior de la iglesia y el camposanto; los prusianos les asaltaron hasta una treintena de veces consecutivas, cubriéndose el terreno circundante con los cuerpos de sus muertos y heridos. En los combates por la villa y sus cercanías, los prusianos habrían tenido más de 6.000 bajas en toda la jornada.
Al anochecer, los prusianos se adueñaron de Plancenoit, reducida en parte a escombros y con varios edificios ardiendo. Los fugitivos se retiraron hacia el oeste, hacia la zona de la Belle Alliance, donde Napoleón dirigía el último foco de resistencia del Ejército del Norte, con tan solo tres batallones de la Guardia Imperial. Por entonces los CE-I, CE-II y CE-VI habían huido en desbandada hacia el sur y la batalla estaba ya perdida para los franceses.
Bajas de la batalla de Waterloo
Los británicos, belgas, holandeses y alemanes tuvieron 16.500 bajas o 1 de cada 4 enfrentados: 3.500 muertos, 10.000 heridos y 3.000 desaparecidos.
Los prusianos perdieron 7.200 bajas: 1.200 muertos, 4.500 heridos y 1.500 desaparecidos.
Las bajas en el ejército francés se estiman en 25.000 muertos y heridos, 8.000 prisioneros y 15.000 desaparecidos, la mayoría por deserción, los aliados capturaron 220 cañones.
Se estima que en la batalla perecieron unos 10.000 caballos, entre muertos y sacrificados posteriormente.
