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Época del Oligoceno (33,9-23)
Tras la Gran Ruptura llegó la última etapa del periodo Paleógeno, se trata del Oligoceno que abarca desde hace 33,9 al 23 millones de años, abarcando casi 11 millones de años. El nombre de Oligoceno procede del griego oligos (pocos), y xainos (reciente)
Clima del Oligoceno
En cuanto al clima del Oligoceno las condiciones fueron bastante extremas. Se caracterizó principalmente por unas temperaturas muy bajas. Durante toda esta época tanto la Antártida como Groenlandia se mantuvieron cubiertas de hielo y aumentando cada vez más. Asimismo, cuando la Antártida se separó completamente de Sudamérica ocasionó que a su alrededor circularán completamente diversas corrientes marinas. Una de estas corrientes marinas es la Circumpolar Antártica que es considerada como una de las más importantes, ya que fue la responsable de que se cubriera de hielo todo el continente de la Antártida y en consecuencia la formación de glaciares. Como consecuencia del enfriamiento, el nivel del mar disminuyó.
Flora del Oligoceno
A principios del Oligoceno, los bosques de hoja ancha y caduca de los polos habían desaparecido y a lo largo de Asia, Norteamérica y Europa, en las latitudes altas, se instaló una mezcla de bosque de coníferas y bosque templado caducifolio. Con las frías temperaturas del Oligoceno, disminuyeron las selvas tropicales y paratropicales, siendo sustituidos por plantas de tipo herbáceo y pastizales que estaban mejor adaptadas a unas condiciones de temperaturas más extremas. Estos pastizales y plantas herbáceas se extendieron por todos los continentes. Su expansión se vio potenciada por muchos animales herbívoros que diseminaron sus semillas mediante los excrementos.
Las plantas leguminosas de las familias de los guisantes y fréjoles continuaron su propagación.
Una exigua tundra había surgido en la Antártida, alrededor de la nueva capa de hielo.
Fauna del Oligoceno
Los paisajes más abiertos permitieron a los animales crecer en tamaño con respecto a las épocas anteriores del Paleógeno. Sudamérica y Australia estaban aparentemente aislados de los demás continentes y desarrollaron una fauna muy distintiva durante el Oligoceno.
Se diversificaron varias clases de mamíferos como los roedores, primates, cánidos, brontoterios (o titanoterio), Indricotherium, proboscideos (Mastodonte y mastodontes, artiodáctilos (Entelodón) y perezosos gigantes (Megaterios). Principalmente en Sudamérica fueron muy abundantes los glyptodontes, doedicurus, megaterios y piroterios. En fin, los mamíferos y las aves evolucionaron y prosperaron. Muchas familias eocenas desaparecieron y se produjo la expansión de muchos de los grupos recientes (desde los minúsculos roedores a los robustos elefantes).
La familia del caballo había desaparecido de Eurasia durante el Eoceno, pero sobrevivió en Norteamérica con un pequeño número de especies, que incluían el Mesohippus y el Miohippus.
Otros ungulados de gran éxito durante el Oligoceno fueron los rinocerontes, incluyendo el mamífero terrestre más grande de todos los tiempos, Indricotherium. También los antecesores de los cerdos llegaron a ser abundantes (Entelodón). Dentro de los primeros primates, el género Aegyptopithecus fue un animal arbóreo del tamaño de un gato, que tenía dientes y cabeza con un gran parecido a los de un simio.
Los reptiles eran abundantes durante el Oligoceno. Choristodera, un grupo de reptiles semiacuáticos similares a los cocodrilos y que aparecieron en tiempos tan lejanos como el Jurásico o Triásico se extinguieron a principios del Oligoceno, posiblemente debido a los cambios climáticos. Las serpientes y lagartos se diversifican.
Mesohippus
A medida que la temperatura y el clima cambiaron, las coníferas comenzaron a superar en número a los árboles de hoja caduca. El bosque se hace menos espeso y la hierba se hace más frecuente. Sus dientes se desarrollan aún más para masticar hojas más duras. Se adapta mejor a correr rápido para escapar de los enemigos que los perseguían, ya no necesitaba los dedos de las patas como su antecesor. Los laterales disminuyen en tamaño, mientras que el dedo medio se ve reforzado terminando en un pequeño casco, pero todavía mantenían los cojines en las extremidades.
El Mesohippus (del griego meso, «medio» e hippus, «caballo») es llamado caballo medio o caballo intermedió. Vivió hace unos 37-32 millones de años, durante el periodo Oligoceno (Era Terciaria o Cenozoico) en América del Norte. Existieron más de una docena de especies de Mesohippus. Eran también ramoneantes, es decir comedores de hojas aunque su alzada alcanza los 60 cm. La cabeza era más grande y larga que la de sus ancestros. Sus ojos eran redondeados y dispuestos más separados a los lados de la cabeza y se retrasan. Su capacidad craneal es mayor, lo que implica una mayor inteligencia. Sus dientes se hacen más largos y tiene tres incisivos y seis molares en cada lado.
Sus patas se hacen más largas, su espalda menos curvada y evolucionó en el Miohippus.
